Estados Unidos rechazó hoy categóricamente la afirmación del presidente encargado de Venezuela, Nicolás Maduro, de que funcionarios del Pentágono y la CIA estén detrás de planes para asesinar al candidato opositor, Henrique Capriles.
Estados Unidos rechaza categóricamente las acusaciones de cualquier participación en cualquier trama para desestabilizar o dañar a nadie en Venezuela, sentenció la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland, en su conferencia de prensa diaria.
Según Maduro, presidente encargado y candidato a las elecciones presidenciales del próximo 14 de abril, la trama buscaría asesinar a su rival, Capriles, para echarle la culpa al Gobierno bolivariano y crear un caos en Venezuela. Esta sería conspirada por los ex embajadores estadounidenses en Caracas Roger Noriega y Otto Reich.
RECHAZAN ACUSACIONES Niego categóricamente esta acusación absurda y desafío a Maduro para que presente las pruebas que afirma tener, escribió Reich el domingo en su cuenta de Twitter, donde atribuyó esa mentira maliciosa a una estrategia cubana dictada a Maduro.
Estos cargos están tan alejados de la realidad que bien puede ser una cortina de humo detrás de la cual el Gobierno venezolano esté planeando eliminar a Capriles, agregó el ex embajador republicano.
Noriega, por su parte, se limitó a señalar en su cuenta en la misma red social que la de Maduro es una acusación idiota.
TENSIÓN DIPLOMÁTICA El pasado 5 de marzo, horas antes de anunciar la muerte del presidente Hugo Chávez, el Gobierno venezolano acusó a los funcionarios estadounidenses David Delmonaco y David Kostale de proponer proyectos desestabilizadores a militares venezolanos, algo que el Departamento de Estado y el Pentágono han negado.
En respuesta, Estados Unidos expulsó a su vez el lunes pasado a Orlando Montañéz Olivares, segundo secretario de la embajada de Venezuela en Washington, y Víctor Camacaro Mata, funcionario del consulado de Nueva York.