En un comunicado, el grupo separatista armado vasco ETA ha advertido este martes de que la negativa del gobierno español a entablar negociaciones hará más difícil encontrar una solución al conflicto y que habrá consecuencias negativas.

En el comunicado, publicado en la web del diario vasco Gara, también anunció que continuará con su compromiso de no atentar, que seguirá trabajando para lograr un solución definitiva y que la representación que nombró para negociar se mantendrá activa.

Eta, acusado de más de 800 muertes a lo largo de cuatro décadas, anunció un cese definitivo de su actividad armada en octubre de 2011. El grupo pedía negociar entre otras cosas, la vuelta a casa de los presos -en cárceles de toda España, así como el desarme y disolución de la organización.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, dijo ayer lunes que España no negociará con una organización terrorista y exigió de ETA una disolución incondicional.

El comunicado se ha hecho público este martes cuando el presidente de España, Mariano Rajoy, se reúne con su homólogo francés, el presidente François Hollande, aliado del gobierno español en su política respecto a ETA.

Ante la pregunta de un periodista durante una comparecencia de ambos líderes, el presidente de España Mariano Rajoy dijo, refiriéndose al comunicado: Yo quiero hablar de consecuencias positivas para todos, que sólo vendrán cuando ETA anuncie definitivamente su disolución y desaparición como organización terrorista.