Evo Morales partió el miércoles de Europa hacia Bolivia después de una extraordinaria crisis diplomática que lo obligó a desviar su avión presidencial a Austria ante la sospecha de que pudiera estar ocultando al ex espía estadounidense Edward Snowden.
Antes de despegar de Viena el miércoles, el presidente boliviano negó que Snowden, acusado de espionaje por filtrar informaciones sobre el control de registros telefónicos y tráfico de Internet que realiza Estados Unidos, viajara en la aeronave presidencial.
El avión tenía previsto realizar una escala para abastecimiento de combustible en las españolas Islas Canarias antes de volar a territorio sudamericano.
¿Cómo podemos tener en el avión a una persona que tiene problemas con su país?, dijo Morales. Es un problema de Estados Unidos, no es un problema de Bolivia y latinoamericano, agregó.
Bolivia acusó a Estados Unidos de ordenar a Europa paralizar el vuelo de Morales y calificó el acto de agresión, pero Francia, Portugal y España, principales implicados en la delicada situación del día anterior, negaron haber bloqueado su espacio aéreo.
NO SOY UN DELINCUENTE El vuelo de Morales fue desviado a Viena el martes por la noche. Bolivia dijo que países como Italia, Francia y Portugal habían decidido cerrar su espacio aéreo ante la sospechosa de que Snowden estuviera huyendo en el avión boliviano.
Según relató Morales, decidieron aterrizar en Austria porque si regresaban a Rusia se podía especular con que traían de vuelta a Snowden. Posteriormente, dijo que España quiso inspeccionar el avión el martes por la noche antes de autorizar el paso por Canarias.
El embajador español (en Viena) me pidió tomar un café dentro del avión para ver el avión y en el fondo poder controlar, afirmó el presidente. Pero no puede por normas internacionales y además no soy ningún delincuente para que controlen el avión.
Por encima de que viaje el presidente está la dignidad y nuestra soberanía. Un avión oficial es un embajador itinerante, agregó. No podía permitir que revisen el avión porque no soy ningún delincuente y porque es un avión oficial. El presidente tiene inmunidad inviolable, dijo el mandatario.
VERSIONES ENCONTRADAS A primera hora del miércoles y con el permiso de Morales, agentes de frontera austriacos inspeccionaron la aeronave y comunicaron, como ya había dicho Bolivia, que Snowden no iba a bordo.
Los países europeos implicados desmintieron la versión de Bolivia. Najat Vallaud-Belkacem, portavoz del gobierno francés, aseguró que el vuelo fue autorizado aunque no aclaró si efectivamente hubo prohibición en un primer momento.
En un comunicado, la cancillería portuguesa explicó que se permitió el vuelo pero no la escala en Lisboa por unos problemas técnicos sin especificar.
Mientras que el canciller español José Manuel García-Margallo afirmó que España no prohibió al presidente boliviano aterrizar en el país ibérico y que tampoco es verdad que solicitase registrar el avión.
No es verdad que España pidiese permiso para registrar el avión, dijo García-Margallo.