No solo los servicios secretos estadounidenses espiaron a sus aliados: según afirmó hoy el ex ministro de Exteriores de Grecia Theodoros Pangalos, el servicio secreto griego (EYP) intervino llamadas telefónicas entre diplomáticos norteamericanos.
Me divertí mucho escuchando conversaciones grabadas por el servicio secreto griego entre el embajador de Estados Unidos en Atenas y su colega en Ankara y con la central en Estados Unidos, afirmó Pangalos en declaraciones a la cadena de radio Vima FM.
Según Pangalos, en esas conversaciones los diplomáticos estadounidenses hablaron de su política con expresiones no aptas para menores. ¿Qué está haciendo este hijo de puta (mother-fucker) de Pangalos?, se habría dicho en una de esas conversaciones, según el ex ministro.
Pangalos, que fue ministro entre 1996 y 1999, reconoció que con las escuchas no se descubrió nada que no se supiera ya sobre la política estadounidense.
De acuerdo a las declaraciones del ex ministro, las escuchas a las que hace referencia se produjeron a finales de la década de 1990, cuando él ocupaba la cartera de Exteriores y era primer ministro el socialdemócrata Kostas Simitis.
SUPUESTO CENTRO DE ESPIONAJE El semanario alemán Der Spiegel publicó ayer una información basada en documentos aportados por Edward Snowden, excolaborador de la Agencia Nacional de Seguridad (NSA) y la CIA, según la cual la embajada estadounidense en Atenas, situada en un céntrico edificio de grandes dimensiones, habría realizado escuchas e interceptación de llamadas a través de un centro instalado en su tejado y que podía ser dirigido por control remoto.