Hollande: "Francia está en guerra contra el Estado Islámico"

Versalles. El presidente de , , prometió hoy una "guerra sin tregua" contra el , al que combatirá en Oriente Medio con medios militares y en su país con una reforma constitucional y un refuerzo de la seguridad interior.

En una comparecencia extraordinaria ante las dos cámaras del Parlamento francés, Hollande pidió que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas apruebe rápidamente una resolución contra el terrorismo.

"Al mismo tiempo, Francia intensificará sus operaciones en Siria", dijo Hollande, quien describió al país asiático como "la mayor fábrica de terroristas que el mundo haya conocido".

Hollande quiere que Francia siga en estado de emergencia durante los próximos tres meses, como propondrá al Parlamento el próximo miércoles. El presidente de Francia espera que la cámara apruebe la medida "antes del fin de semana", dijo hoy en Versalles.

Hollande afirmó que los atentados en París "fueron decididos y planificados en Siria, preparados y organizados en Bélgica y perpetrados en nuestro suelo con complicidades francesas”.

Hollande dijo que los atentados que causaron al menos 129 muertos de 19 nacionalidades estaban destinados a "causar el horror para dividirnos e impresionarnos".

Asimismo, el presidente de Francia anunció hoy una reforma constitucional que mejore las medidas para luchar contra el terrorismo al tiempo que "se protejan las libertades fundamentales".

El enemigo es el Estado Islámico

Hollande dijo también ante el Parlamento que el "enemigo" en Siria es el grupo Estado Islámico, aunque indicó que el presidente sirio Bashar al Assad "no puede constituir" una solución al conflicto.

"En Siria, buscamos incansablemente una solución política, en la que Bashar al Assad no puede constituir una salida, pero nuestro enemigo en Siria es Daech" (acrónimo árabe del Estado Islámico), dijo Hollande.

Redadas en Francia y Bélgica

Las fuerzas del orden detuvieron a 23 personas, pusieron a 104 bajo arresto domiciliario y se incautaron de 31 armas de fuego, cuatro de ellas "de guerra", anunció el ministro del Interior Bernard Cazeneuve.

"Esto solo es un comienzo", advirtió. "Estas acciones van a continuar. La respuesta de la República será de gran envergadura", agregó.

Simultáneamente, la policía belga lanzó una operación en el barrio popular de Molenbeeck, en Bruselas, considerado un bastión del yihadismo y desde donde se sospecha que operaron los autores de los ataques.

La operación terminó sin detenciones, informó la fiscalía a la AFP. Buscaban a Salah Abdeslam, hermano de uno de los kamikazes de los atentados, considerado "peligroso" por la policía francesa y sobre el que pesa una orden de detención internacional. 

La fiscalía francesa anunció el lunes la identificación de dos de kamikazes que perpetraron los ataques, con lo cual ya se conocen cinco de las identidades de los siete suicidas.

Uno de ellos era francés y el otro tenía un pasaporte sirio cuya autenticidad se intenta verificar. Lo que sí se sabe es que entró en la Unión Europea en octubre por Grecia, como miles de refugiados sirios que transitan por este país desde hace meses.

El pasaporte fue hallado junto a su cuerpo, en las inmediaciones del Estadio de Francia, donde se hizo estallar mientras se jugaba un partido amistoso entre Francia y Alemania ante 80.000 espectadores. Está a nombre de Ahmad Al Mohammad, nacido en 1990 en la localidad siria de Idlib

El otro kamikaze identificado, uno de los autores de la matanza en la sala de conciertos El Bataclan, es Samy Amimour, un francés con antecedentes penales nacido en 1987 en un suburbio de París.

Este lunes, Turquía reveló que advirtió dos veces a la policía francesa de las actividades de uno de los yihadistas suicidas del Bataclan, Omar Ismail Mostefai.

Los atentados reabrieron el debate sobre la llegada en los últimos meses de cientos de miles de refugiados que escapan de las guerras en sus países, como los sirios.

Dos estados de Estados Unidos, Michigan y Alabama, anunciaron que rechazarán en lo sucesivo recibir a refugiados sirios por miedo a que entre ellos se cuelen miembros del Estado Islámico.

En Francia, la líder de la extrema derecha Marine Le Pen pidió el "cese inmediato de toda acogida de inmigrantes" .

Este lunes los parisinos intentaban recobrar la normalidad, traumatizados por lo ocurrido pero decididos a no dejarse amilanar.

Los colegios reanudaron las clases y los museos, teatros y otros establecimientos culturales reabrieron sus puertas tras permanecer cerrados todo el fin de semana.

Philippe, un músico de 53 años, acompañó a su hijo al instituto, lo que normalmente no hace. A la gente "le han quitado la tranquilidad al quitarle a los jóvenes", mayoritarios entre las víctimas de los atentados. "Es para tener miedo".

Fuente: Agencias

Contenido sugerido

Contenido GEC