Los dos propietarios detenidos de la discoteca Kiss, la cual se incendió el domingo y acabó con la vida de al menos 231 personas, mantenían un amplio prontuariado policial, según detallan los medios locales.

Según el diario O Globo, uno de ellos, Elissandro Spohr, había sido detenido en dos ocasiones. Primero por haber agredido a clientes en el local nocturno siniestrado y, segundo, por protagonizar un accidente de tránsito en el que fue declarado culpable.

El otro propietario intervenido del Kiss, Mauro Hoffman, es sospechoso de haber participado en un delito por malversación de fondos.

De acuerdo al mismo medio, estos antecedentes aparecen en el registro del Departamento de Policía de Informática, aunque por ahora no han realizado una declaración oficial respecto a estos datos.