El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció hoy su intención de designar por primera vez en la historia del Servicio Secreto a una mujer como directora de la agencia encargada de su seguridad, que el año pasado vivió sus horas más oscuras a causa de un escándalo de prostitución en Colombia.

Al frente del servicio pasaría a estar Julia Pierson, de 53 años, quien como destacó Obama tiene 30 años de experiencia en el Servicio Secreto.

Julia está más que calificada para dirigir la agencia que no sólo protege a los estadounidenses en los grandes eventos y que asegura nuestro sistema financiero, sino que también protege a nuestros líderes y a nuestras primeras familias, inclusive la mía, dijo Obama en un comunicado.

Como veterana de puestos de alta responsabilidad dentro del Servicio Secreto, el último como jefa de gabinete del mismo, Pierson ha tenido una carrera ejemplar y sé que esta experiencia la guiará cuando asuma este nuevo desafío de liderar a los impresionantes hombres y mujeres de esta importante agencia, agregó el mandatario.

LA IMPORTANCIA DEL SERVICIO SECRETO El Servicio Secreto es un grupo de élite que cuenta con unas 150 oficinas y más de 4.000 empleados, un tercio de los mismos uniformados. Entre otros, están encargados de proteger al presidente y a su familia, así como a los ex mandatarios y a las altas autoridades extranjeras que visiten el país.

Esta agencia se encuentra bajo la jurisdicción del Departamento del Tesoro, por motivos históricos: fue fundada en 1865 con la tarea de perseguir a los falsificadores de dinero, algo que hoy en día sigue contándose entre sus responsabilidades. Sólo tras el atentado contra el presidente William McKinley en 1901 se le encomendó también la protección del jefe de Estado del país.

El Servicio Secreto vio manchada su reputación en abril del año pasado durante la Cumbre de las Américas en Cartagena de Indias, Colombia, cuando se conoció que varios de sus agentes contrataron los servicios de prostitutas en vísperas de la llegada de Obama a la cita con sus pares hemisféricos. Esto llevó a que Mark Sullivan, entonces director, renunciara el pasado febrero.