En Louisville, Ali encarna el "verdadero islam" [VIDEO]

En una época en la que los musulmanes son a menudo caricaturizados en Estados Unidos, simbolizaba mejor que nadie la imagen real del islam, pacífica y universal, afirman los habitantes de la ciudad donde creció.

El domingo, dos días después de la muerte de la leyenda del boxeo de 74 años, son todavía cientos en desfilar delante de la casa de su infancia y en el centro cultural construido en su honor. 

Siguen dejando flores, cartas, y dibujos, algunos con mariposas en referencia a una de sus frases de culto: "Vuela como una mariposa y pica como una abeja".

"Como musulmán pienso que es crucial para nosotros contar con una persona así, entre la gente importante, alguien que todo el mundo conoce y que nos da buena imagen", confiesa Hamza Shah, un médico de Louisville.

"Y es que en la actualidad, lo que vemos en los medios es todo lo contrario, una mala imagen de los musulmanes", prosigue, precisando que Ali simboliza "el auténtico islam".

Desde comienzos de 2015, se han cometido ataques yihadistas en París, San Bernardino (California) y Bruselas, que han contribuido a aumentar la desconfianza de una parte de los estadounidenses sobre el mundo islámico. 

El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, ha hecho de esta desconfianza un botín electoral al decir incluso que quería prohibir temporalmente a los musulmanes entrar en suelo norteamericano, lo que provocó la indignación de la comunidad internacional.

"Como musulmanes debemos dirigirnos contra aquellos que utilizan el islam para sus intereses personales", replicó en su momento Mohamed Ali.

Cuando supo del fallecimiento del hombre que abandonó su nombre, Cassius Clay, al convertirse al islam en 1964, Syed Hussain Shaheed lo dejó todo para ir a Louisville.

Este imán de Chicago llegó rodeado de otros religiosos. Juntos, se reúnen frente a una obra de arte delante del Muhammad Ali Center, donde la gente deja ramos de flores.


- De Arabia a Indonesia -

Mohamed Ali "era célebre por múltiples razones pero la principal era que había abrazado la religión musulmana", afirma el imán de nacionalidad estadounidense.

"El más grande", explica, es respetado de Pakistán a Indonesia, de Arabia Saudita a Malasia, y en muchos países africanos, por los valores que siempre ha defendido.

"Nunca quiso matar a nadie", añade en referencia a la negativa de Ali de engrosar las filas estadounidenses durante la guerra de Vietnam, una decisión que hizo que perdiera sus títulos mundiales y no pudiera boxear durante años.

"Siempre luchó por la verdad, y en los países musulmanes amamos a las personas rectas pero también capaces de sentir afecto y de perdonar", concluye Shaheed.

Inmediatamente después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, Mohamed Ali habló a viva voz para tratar de disipar cualquier conato de duda.

"El islam no es una religión asesina, el islam significa paz. No puedo sentarme en casa y mirar a la gente etiquetar a los musulmanes como la causa de ese problema", lanzó entonces.

Bernie Sanders, aspirante a la nominación demócrata, recordó por su lado que el mito de Louisville no era únicamente un atleta extraordinario sino también un inmenso campeón en la lucha por los derechos civiles.

"A los seguidores de Donald Trump que estiman posible decir que adoran a Mohamed Ali pero detestan a los musulmanes les recuerdo que Mohamed Ali era un musulmán muy piadoso para quien la religión era algo central", afirmó el senador de Vermont.


LAS ÚLTIMAS NOTICIAS DEL MUNDO:




 

Contenido sugerido

Contenido GEC