Pistoleros secuestraron y asesinaron a dos periodistas radiales franceses el sábado en el norte de Mali, dijeron funcionarios galos y malienses, capturándolos cuando salían de la casa de un líder miliciano.

Las muertes se producen cuatro días después de que Francia celebrase la libertad de cuatro de sus ciudadanos que pasaron tres años secuestrados por una filial de al-Qaida en el norte de África.

No estaba claro de inmediato quién asesinó a los periodistas. Francia lanzó una intervención militar en enero en su ex colonia para expulsar a extremistas islámicos del poder en Kidal y otros poblados en el norte de Mali. Desde entonces, los rebeldes separatistas han regresado al área.

El presidente francés Francois Hollande expresó su indignación por este acto odioso.

Claude Verlon y Ghislaine Dupont fueron secuestrados por varios hombres armados que iban en un vehículo todoterreno cuando salían de entrevistar al jefe rebelde, dijeron funcionarios.

Posteriormente sus cadáveres fueron arrojados una decena de kilómetros en las afueras del pueblo, en la carretera hacia Tinessako, una comunidad al este de Kidal, de acuerdo con una persona que vio los cuerpos y cuatro funcionarios informados sobre el asunto.

Horas antes, Radio Francia Internacional confirmó los secuestros en su cibersitio, en el que señaló que Dupont, de 51 años, y Verlon, de 58, fueron raptados a la 1 p.m. por hombres armados en Kidal y se desconocía su paradero.

De acuerdo con la información que tenemos, les cortaron las gargantas. No estamos seguros de quién los secuestró, pero los reportes que tenemos indican que fueron islamistas, dijo Lassana Camara, el viceprefecto de Tinessako, que añadió que se ha iniciado una investigación.

Varios funcionarios de Kidal entrevistados por teléfono dijeron que los periodistas de RFI fueron secuestrados después de una entrevista en la casa de Ambeiry Ag Rhissa, jefe interino del Movimiento Nacional por la Liberación del Azawad (MNLA), un movimiento separatista tuareg cuyos insurgentes invadieron el norte de Mali el año pasado. Los rebeldes fueron expulsados más tarde por milicias de al-Qaida en la región, pero en meses recientes han regresado a la prominencia en Kidal.