El Movimiento Pase Libre , que lidera las protestas que sacuden a Brasil desde la semana pasada y que ayer movilizaron a más de un millón de personas en 80 ciudades, anunció hoy que suspenderá las manifestaciones para evaluar la situación ante la infiltración de grupos con otros intereses.
Los dirigentes del movimiento nacido en las universidades y que defiende el transporte público gratuito anunciaron que por ahora no convocarán a nuevas manifestaciones por lo menos en Sao Paulo para evitar que las protestas sean utilizadas para otros fines.
Según Rafael Siqueira, uno de los dirigentes del Movimiento, en las últimas manifestaciones se infiltraron grupos conservadores que defienden otras ideas, como la penalización del aborto y la reducción de la edad en que menores pueden ser juzgados penalmente.
Consideramos que grupos conservadores se infiltraron en los actos para defender propuestas que no nos representan, dijo.
El militante informó de que la decisión de suspender temporalmente las protestas fue adoptada anoche tras los incidentes registrados en la manifestación que congregó a cerca de 110.000 personas en una céntrica avenida de Sao Paulo.
En la protesta se registraron enfrentamientos entre algunos de los manifestantes y militantes de partidos políticos de izquierda que insistían en levantar sus banderas durante la marcha.
Pese a que el Movimiento Pase Libre dice no representar ni ser representado por ningún partido, otras organizaciones que participan en las manifestaciones se declaran totalmente sin partido y rechazan los supuestos intentos de formaciones de izquierda de asumir el mando en las manifestaciones.
Los manifestantes que agredieron a los militantes de partidos de izquierda, algunos armados con navajas, se identificaron como nacionalistas contrarios a cualquier partido político.
La suspensión de nuevos actos no tiene nada que ver con la participación de los partidos. Vamos a analizar y hacer una reflexión profunda con nuestros aliados en la lucha contra el aumento de los pasajes para decidir qué vamos a hacer, afirmó.
Mucha gente de derecha, con pautas con las que no estamos de acuerdo, se está aprovechando de las manifestaciones, agregó.
Pese a que la manifestación de anoche en Sao Paulo se desarrolló en forma parcialmente pacífica, en algunas otras ciudades se registraron graves conflictos, como el intento de invasión de la sede de la Cancillería y de la Alcaldía de Río de Janeiro, por la acción de pequeños grupos de vándalos que también se infiltraron en las protestas.
La protesta por mejores servicios públicos que congregó anoche a cerca de 300.000 personas en Río de Janeiro degeneró en incidentes que dejaron 62 heridos, 10 detenidos y rastros de destrucción en el centro de la ciudad.
Además de Río de Janeiro, también se registraron enfrentamientos con la policía en las manifestaciones realizadas en ciudades como Brasilia, Campinas, Porto Alegre, Vitoria y Salvador.
Las protestas comenzaron la semana pasada en Sao Paulo, exclusivamente contra la subida de las tarifas de transporte público, pero ganaron otras reivindicaciones, como mayores inversiones en la salud y la educación pública, y críticas a los elevados gastos del Gobierno para organizar eventos como el Mundial de fútbol de 2014.
Pese a que varias alcaldías, incluyendo las de Sao Paulo y Río de Janeiro, ya anunciaron la reducción de los pasajes de autobús, metro y tren, los manifestantes mantuvieron sus protestas y las de ayer fueron las más numerosas hasta ahora. EFE