El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, consideró hoy un crimen contra la humanidad el ataque perpetrado el 21 de agosto con presuntas armas químicas en Siria y reiteró que a su país le consta que el régimen del sirio Bashar al Assad fue responsable de ese atentado.

En un discurso pronunciado a la nación, Obama destacó que nadie pondrá en duda esos hechos. El mundo vio esa noche, continuó, los espantosos detalles de un ataque con armas químicas.

Obama insistió en que es necesario responder a un ataque de semejantes características, por lo que recordó que está decidido a lanzar una intervención militar limitada. No obstante, señaló que decidió someter esa decisión a la votación del Congreso de su país, debido a que no existe una amenaza directa e inminente contra Estados Unidos.

FUERZAS ARMADAS ALERTAS Destacó la propuesta rusa para que Siria entregue sus armas químicas sin embargo, Obama señaló que ha pedido a sus Fuerzas Armadas que mantengan la presión contra el régimen de Bachar Al Asad y que continúen preparadas para responder ante un posible ataque militar.

Es demasiado pronto para saber si la oferta tendrá éxito, y cualquier acuerdo debe verificar que Asad mantiene sus compromisos. Pero esta iniciativa tiene el potencial de remover la amenaza de las armas químicas sin el uso de la fuerza, dijo.

Comentó que las Fuerzas Armadas estadounidenses no se andan con medias tintas. Incluso un ataque limitado enviará a Asad un mensaje que ninguna otra nación puede dar, advirtió Obama durante un discurso desde la Sala Este de la Casa Blanca.

Obama, quien ha pedido al Congreso estadounidense autorización para lanzar un ataque militar limitado contra Siria, reiteró hoy que no va a enviar tropas a ese país y que no busca una campaña bélica de largo alcance como las de Irak y Afganistán, ni siquiera una campaña de bombardeos prolongada, como las de Kosovo y Libia.