El primer alcalde electo que reconoce abiertamente ser gay está por asumir su cargo en Zacatecas, un estado del norte de México afectado por la violencia del narcotráfico.
Benjamín Medrano, dueño de un bar para homosexuales y cantante de 47 años, dijo estar orgulloso de ser gay. Algunos grupos activistas consideran que su victoria en la ciudad de Fresnillo el 7 de julio marca un hito significativo en la lucha por los derechos de los homosexuales.
Sin embargo, consideran que es muy pronto para cantar victoria. Medrano reconoce que fue blanco de una campaña maliciosa de llamadas telefónicas en la que sus rivales políticos intentaron difamarlo, como si ser gay fuera un delito.
Pero dice no estar en riesgo por la violencia. Yo no tengo ningún riesgo, porque no tengo con ninguno de los grupos, en absoluto, ninguna relación, dijo a The Associated Press en referencia a los cárteles del narcotráfico —*Los Zetas y el Cartel del Golfo*— que se han enfrentado por el control de Fresnillo, una municipalidad de 230.000 habitantes que se asienta en algunas de las rutas de tráfico del norte de México.
Naturalmente tengo miedo como cualquier ciudadano en Fresnillo, dijo el hombre que asumirá el cargo en setiembre. Señaló que la violencia ha disminuido, pero sigue siendo la peor pesadilla que tenemos en Fresnillo.