Con buen aspecto y sonriente, la reina Isabel II de Inglaterra reapareció hoy en público después de casi dos semanas sin compromisos oficiales con el fin de recuperarse de una gastroenteritis.

La soberana, que el mes próximo cumplirá 87 años, acudió a la estación de metro de Baker Street, con motivo del 150 aniversario del suburbano de Londres, junto a su marido, el duque de Edimburgo, de 91 años, y la duquesa de Cambridge, Catalina, esposa de su nieto el príncipe Guillermo.

Isabel II, que en dos semanas solo se dejó ver en público una vez, llegó a Baker Street ataviada con un conjunto de vestido y abrigo color crema, con sombrero a juego, y bautizó un tren con su nombre tras pasearse por los andenes.

Una gastroenteritis provocó la hospitalización de la reina el pasado 3 de marzo durante 24 horas tras la cual se trasladó a su residencia, el palacio de Buckingham, donde ha guardado reposo desde entonces.

EXTENSA RECUPERACIÓN Pese a que el pasado día 11 tenía previsto retomar su agenda pública con una ceremonia religiosa por el Día de la Commonwealth, finalmente su asistencia se anuló para seguir recuperándose de su dolencia aunque ese día reapareció brevemente en público para firmar un tratado por la igualdad de derechos.

Su hijo el príncipe Andrés, el duque de York, afirmó pocos días después que su madre no estaba enferma y que la cancelación de su agenda se debía a una medida de precaución al ser más sensato no arriesgar su salud.