Cuando intentaba hacer un salto desde una torre de alta tensión de 120 metros, el paracaídas que llevaba en la espalda le falló y no se abrió, lo que produjo una aparatosa caída sobre la nieve.

El joven se salvó de milagro ya que la nieve aún estaba blanda y el impacto no fue tan fuerte. El hecho ocurrió en Konakova, Rusia.

Las imágenes, grabadas por uno de sus amigos, registraron los momentos previos en el que el joven se posiciona con cierto temor antes de dar el salto. Afortunadamente, el joven se salvó de milagro ya que la nieve que aún estaba blanda sirvió como amortiguador de la caída.

Según informa DailyMail, tuvo fracturas en las vértebras, pelvis y ambas piernas.