La Cruz Roja, movimiento humanitario mundial, teme que el tifón Haiyan haya dejado más de 1.000 muertos en su paso por Filipinas, dijo su presidente, Richard Gordon, en declaraciones a la agencia dpa.

Nadie contó los cuerpos, se trata de estimaciones de los trabajadores sobre el terreno. Hay muchos cadáveres y no hay tiempo de contarlos, dijo Gordon.

La cifra oficial de muertos fue elevada hoy por la agencia de gestión de desastres a 138, tras el centenar de víctimas comunicadas anteriormente.

El portavoz de la agencia, Reynaldo Balido, dijo sin embargo que se espera que la cifra aumente a medida que las fuerzas de rescate llegan a las regiones afectadas.

Según las autoridades, 118 de los fallecidos eran de la provincia oriental de Leyte, la más afectada por el tifón, mientras otros 16 murieron en la vecina Samara Oriental. Otras cuatro murieron en otras cuatro provincias diferentes.

El Ministerio de Sanidad está pensando en un lugar para establecer tumbas colectivas.