La policía brasileña informó sobre el arresto de uno de los propietarios de la discoteca Kiss, que ayer fue escenario de una de las más grandes tragedias de Brasil y que causó la muerte de al menos 231 personas a causa de un incendio.

Según informó Globo, Elissandro Calegaro admitió su responsabilidad por tener la licencia de su local vencida. Sin embargo, señaló que la renovación estaba en trámite. Asimismo, culpó a la banda de músicos Gurizada Fandangueira por provocar el siniestro al usar un aparato pirotécnico.

En tanto, la policía informó que los videos de seguridad de la discoteca, que darían nuevas luces sobre el incidente y sus causas, han desaparecido. Calegaro no se quiso referir a este asunto.

Dos miembros de la banda también fueron detenidos de manera preventiva. Los agentes de seguridad de la discoteca también comparecerían ante las autoridades para explicar el bloqueo de las salidas en pleno incendio.