Tarde o temprano, todo padre o madre tendrá que sentarse con su hijo o hija para abordar un tema inherente a la era de Internet: la pornografía.
En la red, el acceso al contenido para adultos está a dos clics de distancia, por no decir que muchas veces no implica su búsqueda, sino que aparece por sí solo.
Sea liberal o conservadora, de libre acceso o restricción, la estrategia que elijan los padres para controlar esta realidad no es fácil de diseñar. Y el gobierno de Reino Unido, en cabeza del primer ministro David Cameron, propuso echarles una mano a los padres en esta labor con una serie de medidas que buscan bloquear el contenido pornográfico en Internet.
Le llovieron críticas y aplausos dentro y fuera de la isla, pero una de las preguntas más frecuentes en los análisis del proyecto es si, en efecto, es posible bloquear la pornografía en Internet.
¿Cómo pretende el gobierno británico controlar la pornografía en internet? ¿Valdrá la pena el esfuerzo?
LA ESTRATEGIA Cameron presentó su plan este lunes inspirado en una preocupación por la difusión de imágenes de abuso sexual y la pornografía, que según él están corroyendo la infancia.
Cada hogar en Reino Unido tendrá bloqueada la pornografía por su proveedor de Internet a menos de que el usuario elija acceder a ella: se activarán filtros favorables a la familia que pueden ser removidos por un adulto.
Además, la posesión de pornografía que representa la violación será ilegal. Cameron propone una lista negra de términos de búsqueda que no arrojarán ningún resultado en buscadores como Google o Bing.
El primer ministro le dijo a la BBC que espera tener un debate con proveedores de servicios, que argumentaron que, como una cuestión de libertad de expresión, los clientes deben ser capaces de buscar la palabra que quieran.
Cameron cree que los proveedores tienen el deber moral de bloquear el contenido considerado ilegal. Y sostiene: No estoy haciendo este discurso porque quiero moralizar o ser alarmista, sino porque profundamente siento, como político y como padre, que ha llegado el momento de actuar. Esto es, simplemente, sobre cómo protegemos a nuestros hijos y a su inocencia.
La propuesta de David Cameron, entonces, puede ser una ayuda para los padres que quieren tener el control sobre el contenido que se ve en las pantallas de los computadores de su casa.
Pero dos preguntas quedan abiertas: ¿de verdad van a poder ejercer ese control? y ¿realmente bloquear la pornografía ayuda a evitar los abusos sexuales?
INTERNET, ¿INCONTROLABLE? El primer comentario que se oyó después de que Cameron empezó a revelar sus intenciones en los últimos días fue que pelear contra Internet es muy difícil y quienes quieren consumir o divulgar material ilegal como la pornografía infantil suelen arreglárselas para hacerlo.
Fenómenos como la piratería de música y películas o la venta de drogas por Internet han demostrado que la prohibición no suele ser muy eficiente para erradicar los problemas que emergen en la red.
El bloguero de tecnología de la revista estadounidense Forbes Tim Worstall escribió que Lo que quiera que ya esté en la red se quedará ahí y la gente va poder encontrarlo como lo encuentra ahora. Es decir, no a través de las páginas principales de los grandes motores de búsqueda.
El ejemplo de la página de intercambio de archivos ilegales The Pirate Bay, que fue bloqueada por varios proveedores de Internet tras una medida del gobierno británico el año pasado, es particularmente diciente, pues tras el bloqueo surgieron diferentes tipos de vínculos alternativos que permitieron el acceso de nuevo con facilidad.
Tres grupos de derechos civiles el Open Rights Group, el Índice de la Censura y el Big Brother Watch escribieron un comunicado rechazado la medida sobre pornografía con el argumento de que los filtros a menudo cometen errores y pueden restringir otros contenidos, como por ejemplo un artículo académico sobre el tema o la pornografía legal.
LA PORNOGRAFÍA, ¿BUENA O MALA? Ejercer el control sobre lo que fluye por Internet, pues, es complejo y requiere de mucha inversión. Pero además, no está claro si la pornografía es la causa de los abusos sexuales y si, en efecto, es mala.
La activista y artista Anna Arrowsmith le dijo recientemente a BBC Mundo que la pornografía sirve para mantener a las parejas unidas, ha liberalizado nuestra actitud hacia la actividad sexual y tiene un papel pedagógico. Y como ella, son cada vez más los que piensan que la pornografía es buena.
Por otro lado, las estadísticas que regularmente se citan sobre cuánta pornografía hay en Internet suelen ser exageradas, como se reportó hace poco en la BBC.
Y volviendo a la relación entre abusos sexuales y pornografía, que es la preocupación principal del gobierno británico, Worstall dice que ejemplos en varios países han demostrado que la ampliación de las leyes sobre pornografía está relacionada a la baja en número de abusos sexuales, pues sirve como válvula de escape de sus necesidades.
Las medidas de David Cameron, pues, dan para un largo e interesante debate. Lo que es justo decir es que los padres que están en la difícil situación de abordar el tema de la pornografía con sus hijos tienen ahora nuevas herramientas.