El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusó al líder opositor Henrique Capriles Radonski de querer llevar al país al odio y a la violencia y lo instó a aceptar su derrota en las elecciones del 14 de abril.

Hay que llamar al fascista mayor a que acepte la derrota. Se la pasa lloriqueando, es un burguesito llorón que quiere llevar al país al odio y a la violencia, dijo en un discurso tras la marcha de trabajadores simpatizantes del gobierno.

La declaración de Maduro fue en cadena de radio y televisión poco después que Capriles anunciara que mañana presentará un recurso legal para impugnar las elecciones del 14 de abril, con las que reitera su desconocimiento a la estrecha victoria de Maduro.

Según el más recientes boletín del CNE, Maduro obtuvo el triunfo con el 50,61 por ciento de los votos (7.586.251) sobre el 49,12 de Capriles (7.361.512), una diferencia de menos de 1,5 puntos porcentuales.

Capriles descartó participar en una auditoría de los resultados que propuso el Consejo Nacional Electoral (CNE), pues este negó el acceso a los cuadernos de votación, un mecanismo que considera clave para aclarar la situación.

El CNE siguió adelante con una revisión propia, auditando una muestra del 46 por ciento de los votos que no fueron auditados el día de las elecciones.