Kurdos arrebatan a yihadistas parte de la presa de Mosul

Bagdad, EFE

Las fuerzas kurdas, con el apoyo aéreo de Estados Unidos, recuperaron el 60% de la estratégica presa de Mosul, hasta ahora controlada por los yihadistas del Estado Islámico (EI), con quienes mantenía duros enfrentamientos desde el mediodía, informó el portavoz peshmerga, Hekmat Halkut.

Halkut añadió que la parte oeste de la presa sigue en manos del EI, aunque advirtió de que las fuerzas kurdas liberarán la totalidad de la infraestructura en las próximas horas.

Además, las fuerzas también conocidas como peshmergas recuperaron las ciudades cristianas de Batnaya y Telesqof, en la provincia septentrional iraquí de Nínive.

Las fuerzas aéreas estadounidenses bombardearon también diferentes grupos, sedes y posiciones del grupo radical en la zona de Telquif, dijo el presidente de la Comisión de Seguridad del Consejo Provincial de Nínive, Mohamed Ibrahim al Bayati.

Estos movimientos son la continuación a la ofensiva que iniciaron el sábado las fuerzas kurdas, en colaboración con la aviación de Estados Unidos, en dirección a la presa de Mosul.

"La importancia estratégica de estos nuevos avances es que constituyen un paso importante hacia la recuperación de la presa de Mosul", dijo otro portavoz de las tropas kurdas, Helgurd Hikmet.

En ese sentido, Al Bayati añadió que Estados Unidos atacó también el proyecto hídrico de Telquif, próximo a la zona de Al Sada y Bauiza, donde provocó importantes bajas entre las filas de los yihadistas.

COMUNICACIÓN OFICIAL EN LA CASA BLANCA
Por su parte, el Mando Central de Estados Unidos informó en un comunicado que en la jornada de hoy, fuerzas militares estadounidenses realizaron 14 ataques contra el EI en esta zona con el objetivo de recuperar la instalación hidráulica.

Esos ataques provocaron daños a diez vehículos armados de los yihadistas, siete todo terrenos de gran tamaño, dos transportes blindados de personal y un puesto de control, añade la nota.

Por otra parte, una fuente médica del Departamento Médico Forense de Nínive informó que fueron 26 los cadáveres de yihadistas que recibió. Además hubieron 17 heridos, algunos de ellos graves. Todos fueron trasladados al Hospital Republicano de Emergencia de la provincia.

Además, otros 12 miembros del E.I fueron abatidos por las fuerzas de seguridad iraquíes, apoyadas por combatientes tribales, en la provincia de Saladino, al sur de Nínive y al norte de Bagdad.

Una fuente de seguridad informó que los fallecidos cayeron en enfrentamientos entre ambos bandos en la localidad de Al Daluaya, unos 80 kilómetros al norte de Bagdad.

LA IMPORTANCIA DE LA PRESA
El avance peshmerga con apoyo estadounidense en el norte de Iraq es un paso clave para la recuperación de los territorios perdidos ocupados por el Estado Islámico, que el pasado 10 de junio se hizo con el control de Mosul, la segunda ciudad más importante del país y capital de la provincia septentrional de Nínive.

La presa de Mosul es una de las principales reservas estratégicas de agua de Iraq, con una capacidad de varios millones de metros cúbicos y está localizada 23 kilómetros al suroeste de la ciudad de Dohuk, en Kurdistán, y constituye una amenaza importante para las ciudades iraquíes en caso de producirse un colapso de la misma, ya que está situada en suelo arenoso, por lo que necesita de una continua inyección de cemento.

"Actualmente, para nosotros, el objetivo es echar al EI de los territorios que ocuparon últimamente, pero el liderazgo político será quien determine los objetivos generales de la operación", señaló Hikmet.

Por liderazgo político Hikmet hace referencia al acuerdo entre el gobierno de Bagdad, el ejecutivo de la región autónoma del Kurdistán y las fuerzas estadounidenses, mientras que limita la actuación de los peshmergas a las localidades limítrofes con la región iraquí de Kurdistán.