Bailes y carteles gigantes: así celebran en la India la victoria de Narendra Modi

Nueva Delhi. La sede del partido gobernante Bharatiya Janata (BJP) en la India se fue llenando este jueves de una masa ruidosa de simpatizantes para festejar la victoria en las elecciones generales, siguiendo la clara mayoría mostrada por el recuento de votos, mientras que el centro del opositor Partido del Congreso aparecía desierto.

El cuartel general del BJP hervía de actividad a pesar del calor, dejando imágenes de partidarios ondeando enormes banderas de color azafrán, color de la formación y sagrado para el hinduismo, bajo el escrutinio de decenas de carteles gigantes de su líder, el primer ministro indio Narendra Modi.

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El partido de Modi lidera el recuento en 305 escaños y ya ha confirmado la victoria en 18 de ellos, lo que le daría una cómoda mayoría para liderar la Lok Sabha, la Cámara Baja, compuesta por 542 diputados.

"Atribuimos esta espectacular victoria, que es mayor a la de 2014, al liderazgo del primer ministro Narendra Modi, la honestidad con la que su gobierno ha trabajado y cumplido en el terreno", afirmó a Efe un sosegado portavoz del BJP, Navin Kohli, desde la sede.

Kohli desglosó los logros del "muy positivo" quinquenio de Modi: la imagen internacional de la India ha mejorado, la corrupción ha disminuido y las ayudas sociales se han extendido a los más pobres.

Con igual felicidad pero más fervor, los seguidores del partido nacionalista hindú bailaban al ritmo de los tambores dentro de la sede, mientras una hilera de trabajadores cargaba grandes cestos con guirnaldas de flores naranjas y amarillas.

Los petardos, habituales en cualquier celebración que se precie en la India, tampoco faltaron a la cita.

Una colorida banda de música con caballos blancos y banderas del BJP incluidas daba el toque final.

Sanyukta Kesari, una activista del BJP tocada de un sombrero con la flor de loto símbolo del partido, dijo a Efe tener muchas expectativas para los próximos cinco años.

"Hemos rellenado todos los agujeros en la carretera en estos últimos cinco años y ahora tenemos que cubrirla con una capa de alquitrán para hacer una India más bonita", relató exultante.

¿Uno de los temas pendientes? La muy conflictiva construcción de un templo hindú donde nació supuestamente el dios Ram en Ayodhya (norte de la India), lugar en el que había una mezquita del siglo XVI destruida por radicales hindúes en 1992, provocando graves disturbios con un millar de muertos.

No solo los seguidores de Modi han empezado a festejar la victoria. El propio primer ministro lanzó un "la India vuelve a ganar" en la red social Twitter.

Buena parte de su Gabinete de Ministros y algunos mandatarios extranjeros han felicitado ya al líder político por la victoria en las maratonianas elecciones, que comenzaron el pasado 11 de abril y finalizaron el pasado domingo tras siete fases y a las que estaban llamadas a votar 900 millones de personas.

La sede del histórico Partido del Congreso, de la dinastía Nehru-Gandhi, ofrecía un marcado contraste.

Camiones de retransmisión por satélite y varias patrullas de la Policía flanqueaban la entrada desierta de la sede, a apenas quince minutos en coche de distancia de la de su rival BJP.

El Congreso, dirigido por Rahul Gandhi, lidera en 50 circunscripciones según los últimos datos de la Comisión Electoral, un resultado que, a pesar de la leve mejoría respecto a los 44 de 2014, se queda bien lejos de la mayoría necesaria y que no permitiría ni siquiera una hipotética coalición de partidos opositores para desbancar a Modi.

En el interior, varias decenas de periodistas a la espera de una rueda de prensa tras la derrota y tan solo un líder del Congreso para atender a los medios, en una pequeña sala con las cortinas cerradas en la que la luz de las lámparas iba y venía a merced de los cortes de luz.

"Estamos desilusionados y al mismo tiempo sorprendidos porque nadie había esperado este tipo de resultados", explicó a Efe Rajeev Shukla, portavoz de la formación opositora.

Los líderes del Congreso creían que la "ola Modi" era una ilusión, un eslogan propagandístico lanzado por la maquinaria del BJP, pero "ahora que los resultados están llegando, parece que sí hay una ola Modi y tenemos que analizar lo que ha pasado".

Para añadir sal a la herida, los resultados de la Comisión Electoral muestran que Rahul Gandhi podría perder su escaño parlamentario de Amethi, en el estado norteño de Uttar Pradesh, frente a la ministra de Textiles, Smriti Irani, del BJP.

"El recuento sigue en curso y solo sabremos el resultado cuando se complete, pero esperamos mantener el puesto", un bastión de los Nehru-Gandhi desde hace décadas, lamentó.

Fuente: EFE