Los manifestantes de Hong Kong usan rayos láser para evitar ser registrados por las cámaras de reconocimiento facial de la policía. (AP).
Los manifestantes de Hong Kong usan rayos láser para evitar ser registrados por las cámaras de reconocimiento facial de la policía. (AP).
Redacción EC

La tensión en sigue al rojo vivo después de que los manifestantes volviesen a provocar el martes la parálisis del aeropuerto de la ciudad, mientras la jefa del Ejecutivo, Carrie Lam, aseguraba que las protestas están llevando la ciudad a un "camino sin retorno".

Las autoridades de Hong Kong anunciaron que todos los vuelos que quedaban por salir de su aeropuerto internacional se suspendían, después de que los manifestantes volviesen a ocupar una terminal.




Cientos de personas regresaron el martes a protestar al aeropuerto internacional hongkonés, uno de los más concurridos de Asia, tras la caótica jornada del lunes, que había dejado más de 300 vuelos cancelados.

Los activistas, muchos vestidos de negro, corearon consignas, cantaron canciones e intentaron entablar conversaciones con los viajeros: algunos, los más frustrados con la situación, les criticaban, pero otros eran más comprensivos.

Así, desplegaron pancartas con mensajes como "Lo siento por las molestias, no tenemos otra opción" y "Se han cargado el ojo derecho de una enfermera", en referencia a que la policía habría disparado munición no letal a bocajarro hiriendo a una joven en el ojo.

Manifestantes de Hong Kong que fueron alcanzados por balas de goma disparadas por la policía. (Reuters).
Manifestantes de Hong Kong que fueron alcanzados por balas de goma disparadas por la policía. (Reuters).

Esta situación llega después de que Hong Kong registrara su décimo fin de semana consecutivo de protestas, que comenzaron con la oposición a una controvertida propuesta de ley de extradición, pero que han evolucionado hacia una serie de demandas de mejora de los mecanismos democráticos de la ciudad.

Sin embargo, la violencia entre la policía y algunos de los manifestantes es cada vez mayor, en una espiral que ha ido en aumento con la sucesión de las marchas de protesta.

--Represión y defensa--

Los manifestantes han apelado a ingeniosos métodos para contrarrestar la acción de la policía de Hong Kong, que está siendo acusada de brutalidad para acabar con las protestas.

Por ejemplo, usan potentes rayos láser para evitar ser detectados por las cámaras de reconocimiento facial que utiliza la policía con el fin de efectuar arrestos.

Reuters.
Reuters.

Los manifestantes también llevan casco, máscara para los ojos o gafas para piscina. Además, están provistos de máscaras antigás.

AP.
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Además, están provistos de suero fisiológico para enjuagar los ojos y así contrarrestar los efectos del gas lacrimógeno. Los guantes ignífugos que llevan sirven para agarrar los botes calientes de los gases que son lanzados por la policía.

Usan conos de tráfico carretero para tapar las bombas lacrimógenas y evitar así que el gas se propague. Las tapas de ollas y sartenes también son usadas para ese fin.

AP.
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Los manifestantes usan celofán enrrollado alrededor de sus brazos y piernas para evitar las irritaciones provocadas por los gases lacrimógenos. 

Las paraguas también sirven para interceptar las bombas lacrimógenas y cubrirse del gas pimienta.

AFP.
AFP.

Con información de EFE y AFP

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