Una cena con Hillary Clinton puede costar US$50.000
Una cena con Hillary Clinton puede costar US$50.000
Gisella López Lenci

Recaudar dinero en eventos privados no es una novedad en las campañas presidenciales estadounidenses. Las cenas están hechas para donantes que pueden pagar, por cabeza, hasta US$50.000 para tener una conversación privada con su candidato preferido, y de paso un plato decente para acompañar la velada.

, que espera convertirse en la primera mujer presidenta de su país, se ha vuelto una experta en recaudar dinero en pequeños eventos haciendo uso de las buenas conexiones que ella y su esposo Bill han labrado con paciencia en sus años en la política.

Solo en lo que va de agosto, la candidata demócrata y su candidato a la vicepresidencia Tim Kaine han participado en 50 de estas cenas, de acuerdo a una investigación de “The Washington Post”. Solo en una de ellas, realizada en Omaha, recaudó US$1,5 millones entre los 15 invitados al evento organizado por Susan Buffet, la hija del magnate Warren Buffet.

En otra cena en Michigan, cada invitado pagó US$25.000 por un momento con la candidata. Fueron 70 personas. Y el domingo pasado, el costo de la entrada fue de US$50.000 para cada uno de los 28 millonarios que llegaron a la casa de Elaine Schuster, una vieja amiga de los Clinton, quien brindó su residencia de Cape Cod, Massachusetts, para la velada. 

Según “The Washington Post”, en estas tres semanas la demócrata ha recaudado para su campaña y su partido unos 32 millones de dólares. 

Pero su financiamiento no solo se apoya en los grandes donantes sino también en los pequeños: US$24 millones recibió en julio de contribuyentes que dieron menos de 200 dólares. Ese mes, el total del dinero que ingresó a la campaña de Clinton fue de US$89 millones, según reportes del Comité Nacional Demócrata. 

—El dinero de Trump—

El millonario no ha querido quedarse atrás en eventos sociales, teniendo en cuenta que esa es casi su especialidad. Pero a diferencia de Clinton, él ha asistido a unas 25 cenas privadas. Esta diferencia puede deberse a que muchos republicanos han decidido darle la espalda a su campaña y preferido abstenerse de dar aportes. 

Trump le ha puesto el acelerador a la recaudación de dinero –pese a que en un momento dijo que era capaz de financiarse a sí mismo– y en julio recibió cerca de US$64 millones. Además, el Partido Republicano recaudó ese mes otros US$16 millones. Nada mal para una campaña que en mayo apenas tenía US$1,6 millones.

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