Gary Johnson, la tercera opción en las elecciones de EE.UU.

El rechazo que han cosechado las candidaturas del republicano Donald Trump y la demócrata Hillary Clinton presentan un escenario sin precedentes para Gary Johnson, el virtual candidato por el Partido Libertario, una tercera agrupación política fundada en 1971 y que obtuvo su mejor resultado en los comicios del 2012: el 1% de los votos. 

Inicio político
Johnson, un empresario que en 1976 fundó Big J Enterprises una pequeña compañía en el rubro construcción que lo tenía a él como el único empleado. Pocos años después, y tras ganar un contrato millonario con Intel, Big J se convirtió en una megaempresa con 1.000 empleados y que registraba ingresos anuales de US$38 millones.

Además de su habilidad para los negocios, Johnson demostró ser un gran deportista al conseguir escalar el monte Everest en mayo del 2003. También participó en varias ediciones del triatlón Ironman. 

Incursionó en la política en 1994, postulando por el Partido Republicano como gobernador de Nuevo México y consiguiendo vencer al demócrata Bruce King por 10 puntos porcentuales. En 1998 fue reelecto con una ventaja de 55% a 45% frente al alcalde de Albuquerque, Martin Chavez. Ocupó el cargo hasta el 2003, debido a que las leyes le impedían postular a una nueva reelección. 

La gestión de Johnson se caracterizó por una fuerte política de reducción de impuestos, alta inversión en la educación, eliminación de la burocracia en las oficinas estatales y una férrea lucha contra la delincuencia. 

Fue bautizado como "El Gobernador Veto" por las 200 leyes (de un total de 442) que decidió vetar en los primeros seis meses de su gobierno debido a que consideraba que representarían gastos inútiles para el Estado. 

"Vetó más proyectos que sus 49 predecesores juntos -750 en total, de las cuáles un tercio eran propuestas republicanas- y vetó algunas líneas de otros cientos de legislaciones. Acreditó su poder de veto con la eliminación del déficit presupuestario del estado de Nuevo México" reseña el portal National Review. 

Y sus medidas mostraron resultados positivos. Dejó al estado con un superávit de mil millones de dólares y se convirtió en uno de los gobernadores más populares de la época. "Es muy respetado en su estado por su excelente liderazgo durante sus dos periodos como gobernador. Recortó el tamaño del gobierno estatal durante su primer mandato y dejó al estado con un superávit bien alto", señaló el periodista Andrew Sullivan.

Fuente: AFP

Además del manejo fiscal, Johnson implementó programas como los cheques escolares, los mismos que llegaron a proveer US$3.500 por hijo a cada familia que decidiera apostar por las escuelas privadas. De esa manera, aseguraba, las escuelas públicas estarían obligadas a subir el nivel que ofrecían para atraer más alumnos o dejarían de percibir recurso del Estado. 

Fue uno de los primeros funcionarios de alto rango en apoyar la legalización de la marihuana y participó activamente liderando las acciones durante el incendio de Cerro Grande en el año 2000. "[Johnson] Aceleró el proceso burocrático para involucrar a agencias estatales y federales y la Guardia Nacional, e incluso ayudó a apagar un poco de fuego con sus pies", reseñó The Denver Post en aquella oportunidad. 

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Las elecciones del 2012 
En el 2011, con ocho años de experiencia en un cargo público (siete menos que el promedio entre candidatos presidenciales), Johnson anunció su precandidatura por el Partido Republicano para los comicios generales del 2012.

Participó en el primer debate, organizado por Fox News, pero excluido de los tres siguientes organizados por CNN y Fox News. Tras el primer debate al que no fue invitado, Johnson publicó un video de 43 minutos por YouTube en el que respondía a todas las preguntas planteadas.

Algunos meses después, Fox News lo invitó a un debate coorganizado con el Partido Republicano en Florida. "Los dos perros de mi vecino han creado más trabajo que esta administración" dijo Johnson en aquella oportunidad. La frase fue elegida por medios como el Time como la mejor del debate. 

Pese a sus intentos por escalar en la carrera, para junio del 2011 Johnson había logrado recaudar únicamente US$180 mil, insuficiente para los millonarios gastos que representan una campaña presidencial en EE.UU. En diciembre de ese año Johnson renunció a su precandidatura republicana, pero no al sueño presidencial. 

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Bienvenido al Partido Libertario 
Tras abandonar el Partido Republicano, Johnson aterrizó en el Partido Libertario. La agrupación concordaba con varias de las políticas del ex gobernador. El anti intervencionismo, la legalización de la marihuana, la defensa a los derechos civiles, oposición a la presencia militar en Afganistán, Libia e Iraq o reducción de impuestos eran algunos de esos puntos. 

Para el 5 de mayo del 2012, cinco meses después de su cambio de tienda política, Johnson ganó la candidatura con el 70% de los votos. Sin embargo, seis meses después, en los comicios generales, consiguió únicamente el 1% de los votos. Aunque la cifra parezca mínima, fue el mejor resultado del Partido Libertario en sus 40 años de vida política. 

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¿Qué oportunidad tendría ahora?
El escenario que presenta la actual campaña genera una oportunidad inédita para el discreto Partido Libertario. El rechazo de parte de los electores hacia los virtuales candidatos, Donald Trump y Hillary Clinton, podría representar una oportunidad de ganar notoriedad. Y Johnson, virtual candidato libertario tras haber ganado tres de los cuatro procesos electorales partidarios (tres primarias y un caucus), buscaría aprovecharlo. 

Según el último sondeo de Data Targeting, publicado el 18 de mayo, los porcentajes de rechazo hacia Trump y Clinton son de 55% y 56% respectivamente. "Cerca de seis de cada diez votantes están insatisfechos con las opciones de elegir entre Clinton y Trump el próximo noviembre", detalla el portal estadounidense Politico. 

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Las cifras de Data Targeting también revelan que el 55% de los encuestados estaría a favor de contar con un candidato independiente que desafíe a los tradicionales. A esto se suma que Johnson consiguió, por primera vez, una cifra doble en una encuesta de intención de voto. 

El sondeo, realizado por la Universidad Monmouth entre el 17 y 20 de marzo, que presentaba el escenario de una elección entre Trump, Clinton y Johnson, le dio una histórica cifra del 11% al ex gobernador de Nuevo México. 

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"No habría comenzado esto si no sintiera que tengo oportunidades de ganar. Es una opción frente a los polarizados Donald Trump y Hillary Clinton. En un país donde cerca del 50% (de votantes) se ha declarado independiente ¿de qué representatividad hablamos? Creo que esos votantes son libertarios" le dijo Johnson a CNN hace dos semanas.

A estas declaraciones se sumó un reclamo de Johnson. "Tengo que estar en los debates, con eso tendría el 20% de votos" afirmó confiado.