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Redacción EC

La Fiscalía de Estados Unidos ha acusado formalmente a un hombre hondureño inspirado por los yihadistas del  de intentar volar con explosivos un centro comercial de Miami.

Vicente Adolfo Solano, de 53 años, fue acusado del delito de intento de uso de una arma de destrucción masiva.

En setiembre pasado, el Buró Federal de Investigaciones (FBI) inició una investigación contra Solano tras recibir una pista sobre su posible radicalización.

Agentes encubiertos entraron en contacto con Solano, que les confesó su afinidad por Estado Islámico, mostró sus videos con una bandera del grupo yihadista de fondo y también mostró interés por perpetrar un atentado parecido al de maratón de Boston del 2013.

Solano tenía intención de detonar un artefacto explosivo en el patio de comidas del centro comercial Dolphin de Miami durante el "Black Friday", día de ofertas y rebajas en Estados Unidos durante las festividades de Acción de Gracias.

Los agentes de encubierto del FBI le proporcionaron entonces un explosivo falso, que Solano se dispuso a activar en el centro comercial, momento en el que fue automáticamente detenido.

La historia

Según la cadena Univisión, a finales de setiembre del 2017, agentes del FBI comenzaron a investigar a Vicente Solano por una información que recibieron de una fuente que trabajó en la DEA. Esta persona reveló que Solano estaba muy molesto con la política exterior de Estados Unidos y que tenía en mente atacar un sitio “donde hubiera mucha gente”.

Solano quería atacar en el Dolphin Mall el día del Black Friday.

El atacante dijo que se decidió por el Dolphin Mall porque estaba cerca de su casa, y porque creía que podía entrar sin levantar sospechas.

“Estaba pensando en la feria de comida o quizás en el sitio donde cantan, allí es donde hay más gente. Ahí es donde se reúne más gente. Y es fácil porque mira, yo me di cuenta… Yo entro, me siento, lo dejo y adiós. Me voy, y no tendré problemas con eso”, dijo Solano a los agentes encubiertos, de acuerdo con Univisión.

La noche del 14 de octubre del 2017, Solano fue al Dolphin Mall para estudiar el sitio y planificar dónde colocaría el explosivo. Los agentes encubiertos le habían recomendado que hiciera un mapa y que buscara un disfraz para esconderse de las cámaras de seguridad.

El viernes 20 de octubre del 2017, Solano se reunió en un hotel con los agentes encubiertos para armar el dispositivo, sin saber que ellos estaban preparando una bomba falsa que jamás explotaría. De allí salieron al Dolphin Mall, donde el atacante avanzó en su plan para dejar la bomba, pero fue detenido por la policía antes de entrar al centro comercial.

Solano se enfrentará durante el juicio a una posible pena de cadena perpetua. 

Con información de EFE y Univisión
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