'The New Yorker' despide a periodista estrella por "conducta sexual inapropiada"

La revista estadounidense 'The New Yorker' despidió este lunes al periodista estrella Ryan Lizza, su principal corresponsal en Washington y colaborador de CNN, por lo que la empresa calificó como "conducta sexual inapropiada".

"Recientemente, el New Yorker supo que Ryan Lizza se involucró en lo que creemos que fue una conducta sexual inapropiada (...) Hemos revisado el asunto y, como resultado, hemos cortado los vínculos con Lizza. Debido a una solicitud de privacidad, no estamos comentando más ", manifestó un portavoz de la revista en un comunicado.

Ryan Lizza es el redactor de más alto rango que tiene 'The New Yorker' en Washington y destaca por sus perfiles de actores políticos estadounidenses. Su publicación sobre el ex director de Comunicaciones de Donald Trump, Anthony Scaramucci, llevó a la renuncia del funcionario.

"Estoy consternado de que The New Yorker haya decidido caracterizar una relación respetuosa con una mujer con la que salí como algo inapropiado", manifestó Lizza tras la decisión del medio.

Además de sus diez años trabajando para la revista, el periodista también publicó en 'GQ', 'The New York Times' y es colaborador de la cadena CNN. Ésta última anunció que Lizza no aparecerá en sus transmisiones "mientras investigamos el caso".

El despido de Ryan Lizza se produce luego de que su nombre apareciera en una lista de acusados que trabajan en los medios, que siguió al escándalo de acoso sexual del productor Harvey Weinstein y llevó a la caída de periodistas como Mark Halperin y Michael Oreskes.

La defensa de la mujer que acusó al periodista indicó que su cliente prefiere el anonimato y "de ninguna manera la mala conducta del Sr. Lizza constituyó una 'relación respetuosa', como ahora ha tratado de caracterizarla".

Según el periodista acusado, 'The New Yorker' no pudo citar "ninguna política de la compañía que haya sido violada" para justificar su despido.

"Lo siento por mis amigos, colegas en el trabajo y seres queridos por la vergüenza que pueda causar este episodio. Me encanta 'The New Yorker', mi hogar durante la última década, y tengo la mayor consideración por las personas que trabajan allí. Pero esta decisión, que se tomó apresuradamente y sin una investigación completa de los hechos relevantes, fue un terrible error", sentenció.

Fuente: Agencias