Redacción EC

Ciudad del Vaticano [Reuters]. El , quien el mes pasado le dio un manotazo en la mano a una mujer que tiró de él, aceptó este miércoles la propuesta de una monja que le pidió un beso, aunque solo después de que ella prometió no morderlo.

La festiva reacción, más en la línea de su papado que el incidente del manotazo, tuvo lugar al comienzo de la audiencia general semanal del papa Francisco.

Mientras caminaba hacia el gran salón donde miles de personas esperaban, una monja emocionada le preguntó si la besaría, gritando en italiano “¡Bacio, Papa!” (¡Un beso, Papa!).

El pontífice le respondió: “¡Oh, (pero) tú muerdes!”, provocando la risa de las personas cercanas a ellos. “¡Calma! Te daré un beso pero tú mantén la calma. ¡No muerdas!”.

Luego de que la religiosa le prometió que no lo mordería, Francisco le dio un beso en la mejilla derecha. Ella saltó de alegría y gritó “Grazie, Papa”. (Gracias, Papa).

El Papa Francisco hace un gesto mientras bromea con una monja. (Foto: Reuters)
El Papa Francisco hace un gesto mientras bromea con una monja. (Foto: Reuters)
/ VATICAN MEDIA

En víspera de Año Nuevo, el papa Francisco, de 83 años, le dio un manotazo en la mano a una mujer que lo agarró y tiró de él en la Plaza de San Pedro.

El video de ese incidente se volvió viral en las redes sociales y al día siguiente el papa Francisco ofreció disculpas y dijo que había dado un “mal ejemplo”.

El papa, a diferencia de algunos de sus predecesores, generalmente es muy informal con los fieles.

En eventos más informales se detiene para besar bebés, bendice a los discapacitados y permite que cientos de personas le toquen la mano.

Pero rechaza que le besen la mano en grandes eventos, diciendo que no quiere que ese gesto de reverencia propague gérmenes.

El incidente del mes pasado fue excepcional. Fue similar a otro hace varios años cuando el papa Francisco reprendió a una mujer que lo jaló con tanta fuerza que casi cayó sobre una persona en silla de ruedas.