Imagen de los encargados del conteo de votos para el Parlamento escocés. AP
Imagen de los encargados del conteo de votos para el Parlamento escocés. AP
/ Jane Barlow
Agencia AFP

Los independentistas escoceses del SNP reivindicaron el sábado una mayoría en el parlamento local en favor de la separación del , lo que según ellos obliga a Londres a aceptar el nuevo referéndum de autodeterminación rechazado por el primer ministro británico .

Dos días después del “superjueves” de elecciones locales en el Reino Unido, los resultados están llegando progresivamente. En Inglaterra son de momento positivos para los conservadores en el poder, y el primer ministro británico superó holgadamente la prueba, arrebatando escaños en territorio tradicionalmente laborista, en especial un preciado bastión del noreste del país, Hartlepool.

En Escocia, donde los conservadores son minoritarios, los nacionalistas escoceses de la popular primera ministra Nicola Sturgeon consolidaron su supremacía, aunque la última predicción este sábado de la BBC le otorga 63 escaños al SNP, a dos de la mayoría absoluta en el parlamento local escocés, de 129 escaños.

Con estas perspectivas, Sturgeon advirtió este sábado al jefe de gobierno británico contra cualquier rechazo a autorizar un referéndum de autodeterminación tras esta esperada victoria.

“No hay simplemente ninguna justificación democrática para que Boris Johnson, o quien sea, intente bloquear el derecho del pueblo escocés a elegir su propio futuro”, declaró Sturgeon en un discurso.

“Al parecer no hay duda de que habrá una mayoría proindependencia en este parlamento”, añadió la primera ministra escocesa, en alusión a los Verdes ecologistas, que son también partidarios de celebrar un referéndum.

“Es la voluntad de este país” agregó Sturgeon, advirtiendo que cualquier iniciativa de los conservadores para impedir un nuevo referéndum los colocaría “en oposición directa con la voluntad del pueblo y demostraría que Reino Unido no es un socio entre partes iguales”.

Johnson, quien debe autorizar este referéndum, se opone firmemente, al considerar que tal consulta solo puede hacerse una vez por generación. En el de 2014, 55% de los electores escoceses votó por permanecer en el Reino Unido.

“Creo que un referéndum en el contexto actual es irresponsable e imprudente”, dijo Johnson al diario Telegraph.

Pero los partidarios de un nuevo referéndum señalan que el Brexit, al cual se oponían un 62% de escoceses, cambió las cosas.

No obstante Sturgeon juega la carta de la prudencia, comprometiéndose a organizar un referéndum “a su debido tiempo”, una vez superada la crisis sanitaria.

- Se mantiene avance conservador -

En cambio, a nivel nacional, y pese a una serie de escándalos sobre vínculos cercanos entre poder e intereses privados, Johnson consiguió mantener el avance que los conservadores lograron en las legislativas de 2019 en el denominado “muro rojo” laborista, esas zonas del norte de Inglaterra afectadas por la desindustrialización y favorables al Brexit.

Por su parte, el Partido Laborista está desconcertado tras la derrota de Hartlepool que dejó al líder del partido Keir Starmer “amargamente decepcionado”.

Starmer prometió hacer “todo lo posible” para recuperar la confianza de los votantes.

Los laboristas puede presumir de muy buenos resultados en Gales, donde mantienen el control del parlamento local, lo que les permite permanecer en el poder.

La laborista Joanne Anderson, de 47 años, fue elegida alcaldesa de Liverpool (norte de Inglaterra), convirtiéndose en la primera mujer negra elegida a la cabeza de una gran ciudad británica.

En Londres, el laborista Sadiq Khan, que en 2016 fue el primer musulmán en gobernar una gran capital occidental, es dado como favorito para un segundo mandato frente al conservador Shaun Bailey, pero los resultados esperados el sábado se anuncian más ajustados de lo previsto.

VIDEO RECOMENDADO

El COVID-19 cumple un año de ser declarado como pandemia

TE PUEDE INTERESAR

Contenido sugerido

Contenido GEC