Gisella López Lenci

América Latina conoce de sobra la polarización, donde todo se divide entre “ellos” y “nosotros” y los grises son cada vez más difusos. Pero si hay un país donde eso está definido en una palabra, ese es Argentina. La emblemática “grieta” que separa a los kirchneristas de los antikirchneristas, lo malo y lo bueno, o viceversa, de acuerdo con el prisma con que se vea.