Milagros Asto Sánchez

El asesinato del presidente Jovenel Moise es el último de los terremotos que ha sacudido a Haití, una nación golpeada por el hambre que, además, lleva varios años sumida en una profunda inestabilidad política y social. Los temores apuntan ahora a un posible aumento del caos e inestabilidad que podrían terminar de hacer estallar al país.