Redacción EC

Wellington. prohibirá las grandes donaciones extranjeras a los partidos y candidatos, además de la propaganda electoral anónima, en medio de temores de que China intente interferir en los comicios del próximo año.

“El riesgo de que se de una injerencia extranjera en las elecciones (de cualquier país) es un fenómeno internacional creciente y puede adoptar diversas formas, incluyendo las donaciones. Nueva Zelanda no es inmune a estos riesgos”, explicó este martes el ministro de Justicia, Andrew Little en un comunicado.

El proyecto de ley presentado hoy por el Gobierno, que cuenta con el apoyo de la oposición y que se tramita de urgencia, limitará las donaciones a 50 dólares NZD (32,5 dólares USD o 29,4 EUR).

La nueva legislación exigirá además a los candidatos y los partidos que se aseguren de que las donaciones que superen ese monto no provengan del exterior.

El ministro laborista recordó que países como Australia, Canadá y Reino Unido ya han legislado y limitado las donaciones anónimas o extranjeras.

Informe desde Canadá

Little, quien no mencionó explícitamente a China como amenaza, recordó que un reciente informe del gobierno de Canadá reveló que la mitad de los países desarrollados democráticos que celebraron elecciones fueron blanco de las amenazas cibernéticas en 2018, una tendencia que crece desde hace 4 años.

Este informe de la Inteligencia canadiense indica que el Partido Comunista de China apunta a la élite empresarial, política e intelectual de Nueva Zelanda y que el acercamiento agresivo a empresas, universidades y centros de investigación busca influir en sus actividades y acceder a su información.

Publicidad anónima en redes

Asimismo la nueva legislación ampliará los requisitos respecto a la propaganda electoral para que se incluya el nombre y la dirección de la publicidad electora con el fin de evitar la difusión de información falsa y anónima.

"Se prohibirá la propaganda anónima en línea que apunte a interferir con nuestra democracia. Si alguien quiere hacer publicidad en línea necesita identificarse de la misma manera como si se publicara en un diario”, precisó el ministro.

La medida llega en medio de los temores por la creciente influencia china en la región del Pacífico y las sospechas de que Pekín ha intentado espiar e interferir en Australia.

China ha negado siempre las acusaciones argumentando que estas sospechas son parte de la mentalidad de la “Guerra Fría”.

Fuente: EFE