Un nuevo actor en proyectos de transporte, por Patrick Wieland
Un nuevo actor en proyectos de transporte, por Patrick Wieland
Patrick Wieland

Hoy, 14 de julio del 2016, el Senace asume un nuevo reto como entidad: clasificar y evaluar los estudios de impacto ambiental detallados (EIA-d) de los proyectos de infraestructura vinculados al subsector Transportes. Proyectos tan significativos como la carretera longitudinal de la sierra (Tramos 4 y 5), el túnel transandino, el ferrocarril Huancayo–Huancavelica, la ampliación, adecuación y modernización de los puertos de Ilo, Chimbote y Salaverry, la línea 3 del metro de Lima, la segunda pista y el nuevo terminal del aeropuerto internacional Jorge Chávez, entre otros que tienen una inversión comprometida superior a los 11 mil millones de dólares, serán evaluados por el Senace.

En el Senace somos conscientes de la relevancia estratégica que tienen dichos proyectos para el desarrollo, conectividad y competitividad del país, así como conocemos los desafíos que estos representan, tales como el alto grado de dinamismo implícito, la voluminosa cartera de proyectos en desarrollo, el déficit de infraestructura existente en el país y su compleja ejecución por las características de nuestra geografía. En ese sentido, nuestros pasos inmediatos estarán enfocados a lograr una evaluación ambiental técnica y objetiva que permita el desarrollo y ejecución oportuna de esos proyectos. 

Asumir la evaluación ambiental del subsector Transportes no solo refleja el cumplimiento del cronograma de transferencia de funciones de manera ordenada y progresiva –el mismo que se inició el 28 de diciembre del 2015 con el sector Energía y Minería y que continúa hasta el año 2020–, sino que también consolida el nuevo modelo de gestión ambiental que viene impulsando la entidad. Este modelo busca generar confianza con el logro de tres grandes objetivos: rigurosidad y uniformidad en la evaluación ambiental; transparencia y diálogo; y participación ciudadana efectiva.

Para ello, en el Senace ya estamos trabajando en criterios técnicos y documentos de gestión aplicables a la evaluación ambiental de proyectos de transportes, los cuales darán uniformidad y predictibilidad a los inversionistas respecto a la evaluación ambiental en dicho subsector, así como reducir formalismos innecesarios sin descuidar los estándares ambientales.

Por ejemplo, elaboraremos los criterios de evaluación para los informes técnicos sustentatorios de proyectos de transportes aplicables a aquellas modificaciones que generen impactos no significativos o que involucren mejoras tecnológicas en dichos proyectos, así como un manual de evaluación de los EIA-d del subsector Transportes que buscará uniformizar y optimizar la labor de nuestros evaluadores. 

Asimismo, nos encontramos en coordinación constante con las diversas entidades promotoras de la inversión en infraestructura de transportes para conocer la cartera de proyectos que ingresará a nuestra entidad. Respecto a la participación ciudadana efectiva, se buscará uniformizar el proceso y mecanismos de participación ciudadana utilizando la guía “Herramientas de gestión social” ya aprobada; y ejecutaremos la hoja de ruta con los pueblos indígenas, cuyo objetivo es construir una relación basada en la confianza mutua. 

Todas estas acciones complementan las que ya hemos aprobado en los primeros seis meses de haber iniciado funciones, entre las cuales podemos destacar la implementación de un sistema de control de calidad que garantiza la idoneidad de todo documento técnico emitido por el Senace y el Protocolo de Trabajo de Campo que dispone la atención de quejas de la población y la alerta temprana de potenciales conflictos sociales. 

Con el inicio de funciones en el subsector Transportes reafirmamos nuestro compromiso de ser una entidad moderna, transparente y eficiente, que tiene como principal función encontrar un punto de equilibrio entre la inversión privada, el cuidado del ambiente y los derechos de las poblaciones, para asegurar las inversiones sostenibles que el país requiere.