Se dio la largada, por Alfredo Torres

La novedad, la sorpresa, suele producir la noticia más atractiva, pero, a veces, la ausencia de cambios puede ser una noticia más relevante. Algo de eso se aprecia en la encuesta de Ipsos para El Comercio, la primera efectuada luego del cierre de las inscripciones y que incluye, por tanto, a los 19 candidatos inscritos. 

La primera noticia podría titularse “sin novedad en el frente”: Keiko Fujimori mantiene incólume su gran ventaja.  El gran riesgo para quien va adelante es empezar a caer y eso no ha ocurrido. Por el contrario, con la arriesgada decisión de jubilar a gran parte de la vieja guardia fujimorista, no solo conservó su 33% de intención de voto sino que, además, redujo su antivoto. Es decir, la proporción de personas que declara que definitivamente no votaría por ella se contrajo de 40% el mes pasado a 34% este mes.

En la medida en que la candidata de Fuerza Popular mantenga esa reducida tasa de rechazo, sus posibilidades de triunfo en la segunda vuelta serán cada vez mayores.
La segunda noticia es el empate entre Pedro Pablo Kuczynski y César Acuña. Ambos cuentan ahora con 13% de respaldo, aunque como resultado de dos procesos paralelos: PPK pierde 3 puntos y Acuña se estanca. No es todavía una tendencia pero ambos tienen motivos para preocuparse. PPK ha mostrado un gran equipo técnico y Acuña ha hecho una enorme inversión publicitaria y, sin embargo, no han logrado atraer a más electores. Las próximas semanas serán críticas para el destino de ambos contendores. 

La tercera noticia es, sin duda, el surgimiento de Julio Guzmán. Como decía el periodista Pedro Tenorio: “Vótame que soy novedad”, sería un buen resumen de su meteórico ascenso. Guzmán saltó en las últimas semanas de menos de 1% a 5% gracias a una hábil estrategia en Facebook, similar a la que siguió PPK hace 5 años. Guzmán registra en esta encuesta 19% de intención de voto en el NSE A y 10% en el NSE B. Es fácil colegir que esos votos fluctuaban antes entre PPK y Toledo. La gran oportunidad para Guzmán es que todavía la mitad de la población no lo conoce, por lo cual es probable que siga creciendo ahora que ya saltó al primer plano.

Los procesos electorales con múltiples candidatos suelen tener efectos inesperados.  El crecimiento de un candidato a costa de otro puede terminar favoreciendo a un tercero. Si el trasvase de votos de PPK para Guzmán continúa, esto podría dejar a Acuña en el segundo lugar o abrir un espacio para el avance de Alan García, un político experto en aprovechar las debilidades del adversario para arremeter en el último tramo de la carrera electoral.

Como ya he comentado en esta misma columna, esta es la campaña más difícil para el líder aprista. El 8% que registra en esta encuesta es una mala noticia para el Apra y el PPC. Ambos partidos esperaban que la alianza volviese a poner al ex presidente en dos dígitos de intención de voto. Ello no ha ocurrido. Todavía puede recuperarse –está a solo 5 puntos del segundo puesto– pero cada semana que pasa vuelve la cuesta más pronunciada. 

De los demás candidatos es poco lo que se puede decir, salvo que la gran mayoría de ellos no pasará la valla electoral. En todo caso, si alguno de ellos se separa del pelotón de la retaguardia en las próximas semanas, lo más probable es que sea un candidato relativamente nuevo –como Guzmán– y no una vieja figura de la política nacional, menos aún si su discurso está anclado en ideas del siglo pasado.