Marca tu voto, por Rolando Arellano
Marca tu voto, por Rolando Arellano
Rolando Arellano C.

Entre las 10 marcas más recordadas por los peruanos (Estudio nacional de marcas 2016 Arellano) sobresalían Gloria e Inca Kola. ¿Su característica central? Productos masivos de buena calidad, con marcas cortas, de connotaciones positivas, que suenan bien, diferentes a las de sus competidores y con decenas de años en la mente de los peruanos. No pasó lo mismo con la mayoría de marcas o nombres de partidos que se presentaron en las elecciones recientes, lo que quizás les restó algo de posibilidades en la contienda.

¿Marcas diferenciables? Pocas, pues hasta no ver la foto del candidato muchos no podíamos diferenciar a Fuerza Popular de Acción Popular o de Alianza Popular. Ni sabíamos quién estaba detrás de Progresando Perú, Todos por el Perú o Perú Libertario. Quien estuvo mejor fue Orden, con un nombre claro y diferente, aunque con un producto que no tuvo la aceptación buscada. 

¿Marcas con tradición? Aparte de Acción Popular, con muchos años en la mente de la gente, quizás de Perú Posible y algo de Solidaridad Nacional, la mayoría de marcas, y de candidatos, no tenían más de unos meses o pocos años en escena. Progresando Perú, Perú Patria Segura, Perú Libertario, Perú Nación entre otros, incluyendo a Todos por el Perú, eran desconocidos por la mayoría al momento del voto.

Por cierto participaron “marcas” partidarias importantes, como el Apra y el PPC, pero perdieron su ventaja al presentarse como Alianza Popular (pues solo los viejos apristas saben que Apra significa Alianza Popular… Revolucionaria Americana). En ese sentido Alianza para el Progreso lo hizo algo mejor, al ponerle a su alianza solamente el adicional y nunca mencionado “del Perú”.  

¿Y marcas con significado interesante? Tenían significado claro Democracia Directa, Solidaridad Nacional, Frente Esperanza y Frente Amplio (del que no se mencionaba el complemento “...por Justicia, Vida y Libertad”). Pero sin duda la mejor relación con el candidato la tuvo Peruanos por el Kambio, con la limitante de la temporalidad que da un nombre tan ligado a una sola persona. 

Y si de logos se trata, fue una pena que los más fuertes y conocidos, el mapa del PPC y la estrella del Apra, se perdieran al mezclarlos. También sorprendió el problema de Todos por el Perú, que no se definió en rojo o en morado, perdiendo oportunidad de posicionarse, y el casco con el que el partido de Olivera reemplazó a la escoba. Interesantes fueron la flor de Verónica Mendoza, que suavizaba su imagen, el naranja con la K que identificaba perfectamente a Keiko Fujimori y los colores chicha con las letras completas del PPK, aunque, en verdad, hasta hicieron extrañar el pescadito del Frepap de otrora.