"Para evitar más muertes que enluten a las familias peruanas, las buenas estadísticas son tan importantes como las vacunas y los buenos médicos". (Ilustración: Víctor Aguilar)
"Para evitar más muertes que enluten a las familias peruanas, las buenas estadísticas son tan importantes como las vacunas y los buenos médicos". (Ilustración: Víctor Aguilar)
/ Víctor Aguilar Rúa
Rolando Arellano C.

¡, el país con mayor cantidad de muertes por del mundo! Como muchas noticias que repite la prensa internacional sobre nuestro país, eso no es cierto. Pero muchos peruanos se esfuerzan en difundirlas sin que nadie proteste. Es tiempo de parar.

Recordemos que al inicio de la , medios y líderes nacionales anunciaban que éramos el país con más contagios del mundo. Pero, como señalamos aquí (¿Somos realmente el país con más contagios? EC 17/8/20), lo que no decían, por ignorancia o mala fe, era que al haber hecho muchas más pruebas que, por ejemplo, México, Argentina o Bolivia, el Perú tenía más diagnosticados por COVID-19 que esos países. Pasados los meses, cuando todos hicieron más ‘tests’, nuestro país bajó considerablemente en la lista de países infectados. Pero el daño a la imagen ya estaba hecho.

Esta semana, nuevamente, junto con la preocupación por las elecciones, amigos de fuera llaman angustiados por otro dato trágico: ¡Somos el país con la mayor tasa de muerte por el virus en el mundo! Pero esta vez nuestros noticieros, a pesar de presentar extensos comentarios de “expertos” que culpaban a la población o a las autoridades, omitieron decir que la cifra de más de 180.000 fallecidos, que triplica el dato oficial anterior, se debe a una mejora en el método de conteo. De hecho, esta metodología, que el Perú es uno de los primeros países en implementar, comprueba algo que la OMS señalaba desde hace tiempo: la cifra real de fallecidos por COVID-19 en el mundo es al menos el triple de la que los países exhiben. No somos, pues, los últimos en la lista de países sanos, sino, más bien, somos los primeros, demostrado ya en dos oportunidades que tenemos estadísticas más confiables sobre la pandemia.

Desde luego, a eso han contribuido los medios peruanos, al pedir insistentemente información a las autoridades, pero muchos de ellos han perdido el derecho de ser felicitados por difundirla sin un análisis imparcial. Más bien y sin dudar, exceptuando a quienes por figuración prefieren presentar solo la versión negativa, debiéramos reconocer el gran trabajo de nuestros científicos en estadística de salud por ser pioneros mundiales en mostrar la verdadera dimensión de la enfermedad. Porque para evitar más muertes que enluten a las familias peruanas, las buenas estadísticas son tan importantes como las vacunas y los buenos médicos.

En fin, pasada la tensa página de las , en el mismo sentido debemos felicitar con nuestro aplauso y atención a esos periodistas que ponderadamente muestran tanto lo malo como lo bueno que nos ocurre. Y que así nos dan motivos para luchar por mejorar. Que tengan una buena semana.