1915: Domingo de Ramos
1915: Domingo de Ramos
Redacción EC

Pese a que la fiesta que en este día celebra la Iglesia reviste caracteres de regocijo público y en las ciudades católicas hay desborde de alegría, en el fondo del alma vibra una nota de tristeza incontenible, cierto abatimiento e incluso amargura, de la cual los hombres de fe no pueden racionalmente sacudirse. Y es que nada hay sobre la Tierra que nos ofrezca más clara idea de las miserias del mundo que la pasión y muerte del Redentor. Las generaciones se suceden y nada hubo, ni jamás habrá, que pueda opacar el brillo y grandeza del catolicismo.