(Ilustración: Giovanni Tazza)
(Ilustración: Giovanni Tazza)
Hace 100 años

Urge abocarse al saneamiento de la capital mediante la realización de obras de agua potable, canalización y pavimentación que efectúen conjuntamente el Gobierno y la municipalidad. Esta no es solo una necesidad vital para nosotros, sino también una exigencia de la cultura y decoro que se acrecienta ante la proximidad del centenario de la independencia. Mientras la capital de la república sea una ciudad con reputación de malsana, mientras el agua potable sea deficiente y contaminada, no se debe pensar en otra clase de obras de carácter público. 

H.L.M.