Enrico Caruso, el tenor italiano más importante en el mundo y tal vez el más famoso de la historia, recibió anoche en el Metropolitan Opera de Nueva York una ovación que duró 15 minutos, con motivo de la celebración de su vigésimo quinto aniversario profesional. El teatro estaba repleto de un público eufórico y feliz. El escenario tenía una decoración especial. Caruso iba recibiendo valiosos obsequios de prominentes personalidades neoyorquinas, que expresaban así su admiración al eximio tenor. Posteriormente, el genial artista fue acompañado por una multitud hasta su hotel.
H.L.M.