Los notables ignotos, por Farinata

Retirados los ministros incómodos del gabinete, le queda a la premier, Ana Jara, una tarea pendiente para lograr la paz política en el país: reformar la DINI bajo la supervisión de una ‘junta de notables’, tal como ha ofrecido. El problema, claro, es que esos notables tendrán que pasar desapercibidos en lo que a ese empeño respecta, por la naturaleza secreta de las materias que tendrán entre manos. No vaya a ser que luego algún gobierno extranjero intente secuestrarlos para penetrar en nuestras intimidades.

¿Pero es acaso esa paradoja de los notables ignotos siquiera posible? Por supuesto que sí. Ahí está para demostrarlo la secta de “los nueve desconocidos” que, según la leyenda, fundó el emperador Asoka, allá por el 273 antes de Cristo, en la India; y que aún hoy –pues, de generación en generación, sus miembros se renuevan– tiene por misión evitar, precisamente, que los hombres hagan un mal uso de la inteligencia.

La idea, entonces, no solo es factible, sino que ciertos rumores afirman que la junta ya existe y está en funciones. Así que la próxima vez que veamos en algún coctelito cuchicheando entre sí a notables como Juan Diego Flórez, Kina Malpartida, Gastón Acurio y Mario Testino, no los importunemos con ‘selfies’ y tonterías por el estilo: quién sabe si no estarán cumpliendo con algún deber sagrado para salvaguardar nuestra democracia.