César Acuña rodeado de sus hijos. (Foto: Twitter).
César Acuña rodeado de sus hijos. (Foto: Twitter).

Saquen a su viejo de esto. Se est autodestruyendo junto a su patrimonio. Decenas de carreras polticas se estn liquidando a su sombra y decenas de miles de chicos ven que su cartn de la Vallejo, de la Seor de Sipn o de la Autnoma del Per vale menos que nunca.

Richard, Kelly y Csar Acua Nez, convenzan a su padre de parar esto de una buena vez. Ustedes se la han llevado toda la vida fcil a costa de los esfuerzos sanos e insanos de Csar Acua Peralta. Han tenido la formacin acadmica temprana a la que su padre lleg con atajos cuya revelacin hoy le ha arruinado la candidatura. Ustedes son el relevo generacional de un hombre al que lo nico redentor que le queda es una renuncia con mea culpa.

Me dirijo a ustedes y no a su padre porque l est en esa dimensin de negacin de la realidad a la que la soberbia arrastra a los hombres que no quieren admitir su fracaso. Humberto Lay s pudo abstraerse y decidi renunciar. Lo mismo hizo Luis Favre, pues, claro, no vea sensato que su candidato patrocinado se siga desangrando contra todo clculo y toda tica.

La permanencia de Acua en la carrera no es el crculo virtuoso de la raza distinta que no desfallece porque se levanta y triunfa. Bah. Es pura perversin de poltico con rabo de paja que, para tapar el incendio, usa ms material combustible. Para justificar el cuento de la coautora del libro de Otoniel Alvarado, falsific firmas en una resolucin que aun si hubiera sido firme, tampoco resolva el embrollo. Si en un comienzo tena que defenderse de un solo plagio, el de la tesis doctoral en la Complutense, ahora tiene varios procesos administrativos y judiciales cuyos resultados lo golpearn en cascada.

Acua Peralta fue vctima de s mismo y de nadie ms. Ni siquiera el cuento de la discriminacin, al que apel balbuceante para defenderse de los plagios, es una coartada plausible. Lo ser para Martin Luther King, que s fue un luchador social. No para l, cuyo motor vital y poltico ha sido el reconocimiento del establishment. Tanto le importa la venia de los hipcritas que hasta se ha convertido en un falso pacato llevando en su lista al ineflable pastor homofbico Julio Rosas. Con su conducta y sus alianzas, Acua Peralta es un traidor para quienes reclaman trato igualitario.

Quiz Richard, Kelly y Csar estn esperando, ansiosos como Anel, Luis Iberico, Csar Villanueva, Vladimir Paz de la Barra y Beatriz Merino, que el JNE lo excluya. Rogarn que el Estado decida por ustedes y le cree a su padre la aureola de vctima de una arbitrariedad. Pero no creo que el JNE, en ltima instancia, consume el error poltico de aplicar una ley tan drstica que ni siquiera ha pasado por una campaa de sensibilizacin. Lo ms probable es que deje a Acua Peralta a expensas del merecido castigo que le aguarda en las urnas.

Aprovechen los reflectores de la campaa para que su padre haga el nico gesto noble que se espera de l: la renuncia como consecuencia de los atajos y falsedades a las que ech mano por su loca ambicin de ser reconocido. Que se ofrezca, arrepentido, como ejemplo de que el esfuerzo, para ser coronado por el xito, no debe estar contaminado de tropelas.

Si se queda, ser reducido a escombros. Las encuestas son lo de menos, las denuncias han destruido la fe de su equipo. Lo del patrimonio es problema de ustedes, pero al menos ahrrennos una exclusin que complicara a la democracia.