“Diversos analistas sostienen que la estrategia de Keiko Fujimori es afectar la reforma del sistema de justicia”.
“Diversos analistas sostienen que la estrategia de Keiko Fujimori es afectar la reforma del sistema de justicia”.
Patricia del Río

Las últimas decisiones de la señora han desencadenado un enorme desconcierto. ¿Qué busca cuando aparece en un video en YouTube para criticar al presidente Vizcarra? ¿Por qué sale, justo ahora, a acusar a de haberse reunido con ella? A continuación algunas hipótesis:

1. Está desesperada por su baja popularidad. De acuerdo, ¿pero golpear a Vizcarra con lo del referéndum le va a subir puntos? Por más mamarrachentos que sean los proyectos enviados por el Ejecutivo, el referéndum conectó con la población e ir en contra de esa medida parece una pésima idea. Quejarse de los plazos, de que se trata de medidas populistas, de que hay cosas más importantes que resolver no hará que los peruanos renuncien a su derecho a ser consultados.

2. Bajar la popularidad de Vizcarra. Ese disparo sí ha hecho daño. Sobre el presidente Vizcarra se instaló una pátina de duda cuando se reveló que se había reunido con la señora Fujimori y lo había negado. Ahora los peruanos se preguntan: ¿nos estará ocultando algo más?, ¿podemos creerle? Lo que resulta insólito de esta estrategia es que los fujimoristas han salido a confesar que Vizcarra se reunió con ellos como si eso fuera un delito, como si se tratara de delincuentes. Vizcarra sale chamuscado, qué duda cabe, pero ellos se pintan como los zombis a los que nadie debería acercarse.

3. Proteger al fiscal Pedro Chávarry. Diversos analistas sostienen que la estrategia de Keiko Fujimori es afectar la reforma del sistema de justicia y salvar al fiscal Chávarry para salir airosa del caso de los cocteles que financiaron su campaña. La hipótesis cobra sentido cuando vemos a tanto fujimorista repitiendo el mantra de que mentir no es tan malo porque miente Vizcarra, miente Chávarry, y así es la vida. Si lo que está buscando Fuerza Popular es justificar por adelantado un blindaje al fiscal de la Nación en el Congreso, deberían tratar de hacerlo menos obvio y recordar que Chávarry es un personaje con un altísimo nivel de desaprobación al que la población quiere ver fuera del Ministerio Público.

4. Fregar. Hipótesis burda pero con muchos adeptos. A Keiko Fujimori se la percibe autoritaria, ceñofruncida y sin ganas de colaborar. Muchas de sus críticas y señalamientos son absolutamente válidos pero hay algo en la forma que adopta para transmitirlos que resulta irritante. No estamos frente a una lideresa de oposición que transmite su preocupación por el país, estamos ante una política molesta porque ya no pone la agenda. Ella quiere dictarle al presidente Vizcarra lo que es importante y urgente, y le ha dejado en claro que si no le hace caso, tiene formas de torcerle el brazo revelando “secretos”.

¿Qué busca exactamente la señora Keiko Fujimori con este nuevo rol desafiante? Difícil saberlo, pero dado lo errático de su discurso pareciera que ni ella misma lo tiene tan claro.