Trucos para la segunda vuelta, por Fernando Vivas
Trucos para la segunda vuelta, por Fernando Vivas
Fernando Vivas

Que no los agarren desprevenidos. Esto es parte de lo que se nos viene encima:

1. ‘PPK loves Vero’. El ppkausismo será más rojo y perra vida que nunca. Total, Susana de la Puente y sus amigas también comen caviar. PPK repetirá hasta cansarse que el agua es para todos y agregará que vale más que el oro; dirá que una nueva Constitución no es necesaria, pero un buen paquete de reformas constitucionales no estaría mal. El salario mínimo, que el gobierno subió a los S/850 que prometía en su plan, bueno, pues, llevémoslo a S/950 para conciliar con el Frente Amplio, que ofrece S/1.000. Los derechos laborales, mmm... ese sí es un tema complicado. Pero el gas será para los peruanos, claro que sí, y tu polo petroquímico del sur me parece ‘mostro’, Vero. ¡Todos somos diversificación productiva, el que no salta es un fujimorista estreñido!

2. Keiko es el pueblo. ¿Acaso los fujimoristas se van a chupar el dedo mientras les dicen su vida? Keiko mostrará la fuerza de un partido que tiene operadores en todos los rincones donde PPK es como un producto importado que pocas veces llega. Se presentará enérgica y coreográficamente, como en su mitin de cierre, con la juventud que dejó de aparecer en la campaña ppkausa. 

3. ¿Nadine neutral? Imposible. Su antifujimorismo campea y su candidato es PPK. Eso no se discute. No hará campaña, porque sería muy rochoso y PPK lo rechazaría, pero ojo a cualquier movida policial, militar, del aparato de la Onagi o de la Sunat para fastidiar a Fuerza Popular.

4. Barney es chévere. Y también Alan, Lulú, Julio Guzmán, Acuña, el pastor Lay y hasta Goyo Santos, a quien PPK ya anunció que quiere visitar en Piedras Gordas. En este país de débiles partidos, la capacidad de endose de los perdedores es relativa, limitada e imposible de medir. Pero el gesto de acercarse a ellos es fundamental en la conquista del electorado de segunda vuelta.

5. Keiko reconciliación. Fuerza Popular se estará arrepintiendo de no haber hecho más tun tun en el pecho durante la primera vuelta. Ahora es algo tarde, porque sonaría oportunista y forzado. Pero tendrá otra actitud: aquí estoy con mi mochila que no voy a ocultar y quiero reconciliarme contigo, esto es lo que hizo mi padre y esto es lo que yo te propongo, mira las diferencias, conoce a mis nuevos voceros.

6. Los imponderables. Si el JNE no da más sorpresas, las darán las nuevas joyitas que han entrado con rabo de paja o ansia de figurettis al Congreso, algún destape tipo plagio de Acuña, un problema de salud, un ‘blooper’ tipo ‘no quiero chicharrón’, un escándalo, un accidente. La segunda vuelta no solo la decidimos nosotros, también el azar o la mano de Dios, como lo quieran llamar.