"Hemos perdido la sonrisa, la furia, el desconcierto". (Ilustración: Giovanni Tazza)
"Hemos perdido la sonrisa, la furia, el desconcierto". (Ilustración: Giovanni Tazza)
Patricia del Río

Se acabó la cuarentena y es hora de entrar a una nueva normalidad: distanciamiento social, nada de abrazos y besos, y a ponerse las mascarillas. Barbijo, tapabocas, nasobuco, llámenlo como quieran. Ese pedazo de tela que solo deja al descubierto nuestros ojos es el símbolo del coronavirus. Equivale a la manzana de Apple, al pajarito azul de Twitter. Probablemente, durante mucho tiempo, los niños dibujen a su papá y mamá con la cara parcialmente tapada.