Balance de la pandemia: en 9 regiones se superó el récord de mortalidad mundial por COVID-19 | INFORME

El récord registrado a nivel nacional muestra marcados contrastes por zonas geográficas. Nueve regiones del país han tenido índices de mortalidad que incluso superan los registrados en promedio. Lima Metropolitana y el Callao, que concentraron más de la mitad de los casos y decesos totales, reportaron un índice de 793 muertes por 100 mil y 906 muertes por 100 mil, resultado muy por encima de la cifra nacional.

Además de la capital completan la lista regiones pobladas o ubicadas en la franja costera como Ica, Moquegua, Lima Provincias, Lambayeque, Arequipa, Tumbes y Piura, que en algún momento de la pandemia se identificaron como los lugares más golpeados o donde se advirtieron los primeros brotes durante la pandemia.

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En el interior, el índice más alto de mortalidad se registró en Ica, con 901 decesos por 100 mil personas. Si esta región fuera un país, su indicador sería casi el doble del registrado en Bulgaria, la segunda nación más afectada luego del Perú. Tal como informó este Diario a inicios de la segunda ola, en esta región (especialmente en Chincha) se repartió en lugares públicos tratamientos sin evidencia científica como la ivermectina.

Según una investigación de la Contraloría General de la República, titulada “Informe de Orientación de Oficio N°024-2022-OCI/5491- SOO”, entre enero del 2020 y abril del 2022 el Estado invirtió más de S/5,8 millones en la adquisición de estos medicamentos, de los cuales S/2.2 millones (el 38% del monto total) aún seguía en almacenes y con riesgo de vencimiento.

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¿Qué factores llevaron al Perú a ser la nación más golpeada por la pandemia? Para Juan Rodríguez Abad, profesor de los Programas en Salud de ESAN Graduate School of Business, este hecho ha estado relacionado al atraso estructural o a la elevada brecha de infraestructura en el sector salud, a lo cual se suma la incapacidad en la gestión, la alta rotación de funcionarios y los problemas de corrupción.

“Hay que empezar a mejorar la gestión. Todos están preocupados por el corto plazo, según un reporte de Contraloría alrededor del 15% de lo que se invierte en salud se va en corrupción. Esto contribuye a que no tengamos una buena oferta de salud, todavía no llegamos al nivel que necesitamos. Mejorar esto es complicado porque parte de una decisión política”, explica.

El especialista agrega que casi un tercio de la inversión anual para proyectos de inversión en salud en todos los niveles de gobierno (estimada en S/3 mil millones) no es utilizada.

“Presupuesto ha habido, pero tienes problemas de gestión. Si tienes cambios constantes es complicado. Apostaría por centrarnos a futuro en elegir adecuadamente a las autoridades que luego escogerán a las personas que deberían tener los perfiles adecuados para los cargos”, puntualizó.