Según un borrador del dictamen, los maestros interinos regresarán a la misma plaza que ocuparon como nombrados o contratados, o en una plaza vacante que se les asigne (Foto: Lino Chipana/ archivo)
Según un borrador del dictamen, los maestros interinos regresarán a la misma plaza que ocuparon como nombrados o contratados, o en una plaza vacante que se les asigne (Foto: Lino Chipana/ archivo)
Jorge Falen

La Comisión de Educación del Congreso aprobó el 19 de noviembre un dictamen que impactaría en la selección de los profesores que ejercen la carrera pública magisterial.

La norma está basada en cuatro proyectos de ley que reincorporan a la labor docente a un grupo de maestros nombrados de forma interina durante la vigencia de la Ley General del Profesorado, desde 1984, y cesados en el 2014 por el Ministerio de Educación (Minedu), porque en aquel entonces no tenían título profesional o no lo habían regularizado. La normal implicaría que se restituya a aquellos que acreditan tener ya un título.

Si bien el dictamen aún no ha sido debatido y votado en el pleno del Congreso, este ha sido cuestionado por el Minedu. El titular del sector, Daniel Alfaro, señaló que su aprobación afectará la calidad de la educación, así como el criterio de meritocracia establecido en la Ley de Reforma Magisterial, que está vigente desde el 2014.

—Antecedentes—
La contratación de maestros sin título pedagógico se estableció en 1984 con la vigencia de la Ley General del Profesorado y permitió que estos enseñaran en colegios públicos de lugares remotos cuya demanda no podía ser cubierta por los profesionales de la educación. Según el ministerio, los maestros interinos tuvieron casi tres décadas para regularizar su título pedagógico; sin embargo, pocos lo hicieron.

Desde el 2007, con la entrada en vigencia de la Ley de Carrera Pública Magisterial, el ingreso a la carrera docente solo es posible mediante concurso público. En el 2012, esta fue reemplazada por la Ley de Reforma Magisterial, que estableció un plazo de dos años para que los docentes sin título pedagógico pudieran acreditar uno. De no cumplir aquel plazo, serían retirados.

Posteriormente, en noviembre del 2014, el Minedu convocó a una evaluación excepcional para los 14.863 profesores que no contaban con (o no regularizaban) su título pedagógico. De este número, el 35% (5.315) se presentó a la prueba y solo 546 ingresaron a la carrera magisterial; por tal razón fueron retirados 14.317.

Según el análisis técnico de la propuesta legislativa, algunos maestros cesados ya contaban con un título antes de la entrada en vigencia de la Ley de Reforma Magisterial, pero no habían sido incorporados a la carrera magisterial. De estos, 148 retornaron mediante mandato judicial. La Comisión de Educación señaló también que unos 6.064 docentes interinos cesados fueron otra vez contratados en los dos últimos años para enseñar en zonas rurales y alejadas.

—Posturas encontradas—
El dictamen fue aprobado en la Comisión de Educación con 12 votos a favor, 0 en contra y 2 abstenciones.

Jorge Meléndez (Peruanos por el Kambio), vicepresidente de este grupo, se abstuvo en la votación. En diálogo con El Comercio, él pide que se mejore y se adecúe a la Ley de Reforma Magisterial antes de que sea abordado en el pleno.

“Si incorporamos a todos de golpe, vamos a generar un problema social. Se debe trabajar con el Minedu para ver cómo los maestros interinos puedan ser capacitados o ampliar el presupuesto”, opina.

El secretario general del Sutep, Alfredo Moreno, considera que fue “arbitrario” el despido de los profesores que no acreditaron su título en el 2014. “Esperamos que el pleno del Congreso apruebe y pueda resarcir en cierto modo el legítimo derecho de los maestros [cesados]. A ellos debieron haberles aplicado una prueba de desempeño docente”, opina.

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