Machu Picchu recibirá hasta un máximo de 2.244 visitantes al día

El Ministerio de Cultura estableció que la ciudadela inca de Machu Picchu (Cusco) solo reciba un total de 2,244 visitantes al día. La disposición figura en la Resolución Ministerial N° 173-2020-MC publicada hoy en el boletín de Normas Legales del Diario Oficial El Peruano.

La medida fue sustentada en el informe que realizó la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, a través del documento ‘Implementación de las recomendaciones del “Estudio de capacidad de carga y límites de cambio aceptable para el Santuario Histórico de Machu Picchu - 2015” y resultados obtenidos: 2016-2019′.

“Aprobar la capacidad de admisión a la Llaqta de Machupicchu en 2,244 visitantes al día, en atención al sustento formulado por la Dirección Desconcentrada de Cultura de Cusco, a través del documento mencionado, que forma parte integrante de la presente resolución”, se puede leer en la publicación.

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En la norma también se incluye la decisión del comité del patrimonio mundial de la Unesco, que instó al Estado peruano a garantizar que la evaluación del estudio sobre la capacidad de carga de 2015 se centre en el Valor Universal Excepcional (VUE) de la propiedad.

Tras esto, debe respetarse aplicando límites claros junto con las regulaciones y la diferenciación de los flujos de visitantes y la promoción de sitios de visita alternativos fuera de la Llaqta.

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¿Quiénes son las personas que corren más riesgo por el coronavirus?

Debido a que el COVID-19 es un nuevo coronavirus, de acuerdo con los reportes que se tienen a nivel mundial, las personas mayores y quienes padecen afecciones médicas preexistentes como hipertensión arterial, enfermedades cardiacas o diabetes son las que desarrollan casos graves de la enfermedad con más frecuencia que otras.

¿Cómo se contagia el coronavirus?

El COVID-19 se contagia por el contacto de una persona sana con otra que esté infectada. Esta enfermedad se propaga de persona a persona mediante las gotículas procedentes de la nariz o boca cuando el que se encuentra enfermo tose o exhala.

En muchos casos, estas gotículas caen sobre objetos o superficies, que después tocan otros individuos y se llevan a la nariz, ojos o boca cuando pasan sus manos por la cara.