Declararán en emergencia zonas aledañas al volcán Ubinas

El presidente del Consejo de Ministros, René Cornejo, informó que los pueblos aledaños al volcán Ubinas serán declarados en emergencia para garantizar la atención a los pobladores afectados.

Cornejo se reunió ayer en Lima con los presidentes regionales de Arequipa y Moquegua y especialistas del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet) para conocer las características de la erupción del volcán. Luego de la cita, Cornejo anunció que un equipo técnico del gobierno se encargará de establecer los planes de trabajo para atender y trasladar a los pobladores afectados.

Una de las acciones que se coordinó con los ministerios de Salud, Agricultura, Vivienda y Energía fue el traslado de materiales para ayudar a la población afectada por la caída de ceniza. Además, tres brigadas de salud serán desplazadas a los distritos de Ubinas y San Juan de Tarucani para vigilar las fuentes de agua y atender a la población. Se distribuirán 30.000 mascarillas y 10.000 lentes para prevenir afecciones por contacto con la ceniza.

El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento llevará a la zona donde se ubique el refugio 300 módulos, mientras que el Ministerio de Energía y Minas se encargará de la instalación de torres de iluminación.

CENIZAS EN QUERAPI

Mientras se discutía la ayuda en Lima, ayer los pobladores de Querapi reportaron al Observatorio Vulcanológico del Ingemmet (OVI) la caída de residuos sobre sus techos. Según indicaron, desde el volcán descendían piedras hasta el pueblo, el más cercano al cráter.

El jefe del observatorio, Gersy Mariño, aclaró que fue una caída constante de ceniza. “Estamos hablando de ceniza granulada con un tamaño mayor al de un grano de azúcar rubia”, comentó el experto.

Hasta ayer, las plumas de ceniza alcanzaban los 3.000 metros de altura. Los especialistas dicen que el proceso de erupción del Ubinas ya superó los episodios registrados en setiembre del 2013. Agregaron que existe una presencia importante de lava en el cráter del volcán, la que es expulsada de manera constante en forma de ceniza y piedras incandescentes.

La ceniza es dispersada por el viento hasta los poblados de Querapi, Ubinas, Sacoaya y Tonohaya, en un radio de 7 kilómetros. Por eso se recomendó al Gobierno Regional de Moquegua que tome muestras de los manantiales de agua cercanos para verificar si aún son aptos para el consumo humano.