Chulucanas: viviendo en un horno

Piura viene batiendo sus records de calor este verano y todo indica que para marzo la cosa podría ponerse peor. En la capital de la región se registró la semana pasada 38.2 grados, es decir, se batió el pico histórico. Mientras, en Chulucanas, conocida ciudad piurana de la provincia de Morropón, la temperatura rozó en enero los 40 grados por primera vez (39.6).

“En verano siempre aumentan las temperaturas pero, en este caso, esto ha coincido con la presencia de cielos muy despejados. Hay una atmosfera muy limpia y seca, sin humedad, y eso hace que los rayos solares ingresen con energía y lleguen a la superficie de la tierra”, dice Jorge Yerren, el director regional del Senamhi Piura-Tumbes.

La vida en Chulucanas es difícil. Pese a la escasez generalizada de agua, la población se baña 3 o 4 veces al día porque es la única manera de bajar la temperatura corporal. “La calor no te deja hacer nada. Si te mueves, peor es. Más calor te da”, dice Juan Cullcas (63), mecánico al que encontramos al mediodía en la puerta de su casa. El sol es tan fuerte que ha preferido sentarse y esperar a una hora del día más propicia para trabajar. “Los niños se enfermaban de calor, se deshidratan”,anota.

Los transportistas de carga ligera, conocidos como burreros -por el animal que emplean-, también están entre los más castigados por el calor. Ellos van por los caminos a la velocidad que su bestia le imprime, que suele ser lenta. “El sol está muy fuerte, más que el año pasado. Uno se protege con el gorrito o la ropa. Antes no usábamos polo, pero ahora el sol nos obliga a ponernos uno para poder proteger la piel”, dice Francisco Ruiz, agricultor que todo el día emprende el viaje desde Chulucanas hasta Frías, en la sierra de Piura.

“Chulucanas es ahorita un horno, por no decir un infierno. Nos estamos derritiendo”, anota Ubaldo Alvarado (65), observador del Senamhi de la estación Chulucanas. Según la entidad, los pronósticos para marzo indican que las condiciones no cambiarían mucho, por lo que se prevé que se podría volver a alcanzar los mismos picos de calor.

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