En el Centro de Lima se puede encontrar a menores que dibujan en el suelo y piden dinero a los transeúntes. Según la fiscalía , algunos son captados por tratantes de personas. (Foto: Anthony Niño de Guzmán)
En el Centro de Lima se puede encontrar a menores que dibujan en el suelo y piden dinero a los transeúntes. Según la fiscalía , algunos son captados por tratantes de personas. (Foto: Anthony Niño de Guzmán)
Lourdes Fernández Calvo

Su contextura parece de una niña de 7 años, pero ella dice que tiene 9. Cuenta que trabaja todos los días junto a sus hermanos dibujando en el suelo, en las calles del Centro de Lima. Ellos dibujan y ella recibe el dinero que la gente ofrece. Cuando le preguntan dónde vive, ella se esfuerza por recordar como si fuera un libreto aprendido. “¡Canto Rey!”, grita después de unos minutos.

Según ha investigado el Ministerio Público, durante época de vacaciones (entre diciembre y marzo) niños y adolescentes son captados por tratantes de personas para ser explotados sexual y laboralmente. Algunos, afirman, son llevados al servicio doméstico, pero la mayoría es para mendicidad.

“Los ponen a trabajar por varias horas haciendo dibujos en el piso, por ejemplo”, precisó la fiscal de trata de personas de Lima, Berenice Romero.

Según la fiscalía, les prometen obtener dinero fácilmente o pasar unos meses de vacaciones en Lima. La promesa no solo se la hacen a ellos, los niños, también engañan a sus padres. Obtienen sus autorizaciones y luego los sacan de sus casas.

El ciclo de explotación continúa así: los menores (desde los 9 años) viajan solos (desde Huánuco, Huancavelica y algunas comunidades de Pucallpa) con la autorización de sus padres y aseguran que van a Lima a inscribirse a una academia de fútbol o de natación. Dicen que pasarán tres meses de vacaciones con su tía o algún familiar, pero no conocen adónde van a ir. Aseguran que los van a esperar en el terminal, pero en realidad el captador viene con ellos.

“Les venden el sueño dorado. Los padres creen en la persona que les ha ofrecido ayuda para sus hijos y creen que les darán una propina, por eso autorizan el viaje”, comenta Romero.

—En minería ilegal—

Entre diciembre y marzo, época de vacaciones escolares, la captación de menores de edad por tratantes de personas aumenta, según un informe de la ONG CHS Alternativo.

El estudio explica que, durante estos meses, los adolescentes se encuentran más vulnerables a caer en las mafias de tratantes porque salen de sus casas en busca de trabajo para poder financiar la compra de sus libros, útiles escolares e, incluso, la matrícula del colegio.

El director de CHS Alternativo, Ricardo Valdés, indicó que se han identificado rutas en la Amazonía donde los adolescentes y jóvenes son captados para luego ser explotados sexual y laboralmente en la minería ilegal, en Madre de Dios y Arequipa.

Se lleva a menores a zonas de minería para ser explotadas sexualmente.  (Foto: Dante Piaggio / Archivo)
Se lleva a menores a zonas de minería para ser explotadas sexualmente. (Foto: Dante Piaggio / Archivo)

“En Cusco y Puno hay una población joven altamente pobre. Usan a los jóvenes para ir a las minas y a las mujeres para explotarlas sexualmente en los bares”, agregó el especialista.

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