Alcalde de Yurúa: “Nos obligan a pedir dinero de rodillas”
Alcalde de Yurúa: “Nos obligan a pedir dinero de rodillas”
Oscar Paz Campuzano

— En qué estado encontró la Municipalidad de tras asumir la gestión este año?

Endeudada por S/.1’800.000. Son deudas de liquidaciones de obras, devengados a trabajadores a quienes no les pagaron tres meses, deudas por elaborar perfiles de proyectos. Encontré, además, un inventario canibalizado: se llevaron motores, ‘peque peques’, cultivadoras y motosierras. Esto lo denuncié al Ministerio Público.

— ¿Qué era lo más urgente atender?

La salud. Tras perder la elección, la gestión anterior había abandonado sus obligaciones: ya no se daba apoyo a los enfermos, por ejemplo. Incluso encontramos la posta médica cerrada con candado. Nadie atendía; era un caos. Entonces contraté dos técnicos locales y luego enfermeras.

— Pero ustedes tenían a una médica pagada por el gobierno regional. ¿Qué pasó?

Estuvo unos días en enero y se fue. Argumentó que la población la había amenazado de muerte. Eso hacen los profesionales para irse de Yurúa. Y los directores de salud le dan la razón. ¡Increíble! Tuvimos que contratar a un médico pagándole S/.6 mil cada mes.

— ¿Y no conversó con el gobernador regional de Ucayali?

La vez que me reuní con él dijo: “alcalde, lo primero que te voy a decir es que plata no hay. Ahora sí, siéntate y cuéntame”. Me quedé sin ganas de hablar.

— Según el Sistema Nacional de Hogares (Sisfoh), el 98,9% de son pobres y pobres extremos.

Este año he ido a Lima unas 15 veces, pero no hemos recibido respuestas positivas. Siento que somos ignorados. Me ha pasado que en el Ministerio de Economía me preguntan en dónde queda Yurúa. Entonces, pido una hoja bond y les dibujo un mapa. Luego me dicen que espere para ver si estamos priorizados en sus planes.

— ¿Y están priorizados?

Conversé con el jefe del Fondo de Cooperación para el Desarrollo (Foncodes) de Ucayali. Me dijo que su política era apoyar a las zonas alejadas, con altos índices de pobreza y desnutrición. ¿Y Yurúa? No está en mi plan, respondió. Pero sí está considerado el distrito de Masisea, ubicado a dos horas de Pucallpa por río, mientras que a Yurúa solo se llega en avión. Me responde que están apoyando esa zona porque en el Alto Tamaya-Saweto madereros ilegales mataron a cuatro nativos [entre ellos el líder ashéninka Edwin Chota]. Le dije: “oiga, señor, ¿me está diciendo que deben morir personas para ser incluidas en su plan del 2016”?

— ¿Cuál es su presupuesto?

La gestión anterior trabajaba con S/.9 millones, a nosotros nos recortaron a S/.4,8 mlls. De eso pagamos las deudas, los servicios públicos, a los médicos, apoyamos los traslados de pacientes que a veces nos cuesta hasta S/.7.500. [...] Siento que el centralismo no ha acabado. Les recortan el presupuesto a los gobiernos locales para dárselo a los ministerios. Entonces, el Gobierno nos obliga a los alcaldes a pedirle dinero de rodillas para que atienda nuestras demandas.

— ¿Tanto así?

A veces llego a los ministerios y me dicen: “¿Quién es usted?”. El alcalde de Yurúa. “Vuelva mañana, señor”. Se olvidan que venimos desde la frontera. Los alcaldes no valemos nada ni siquiera para un director ministerial.

— ¿Por qué en la ciudad fronteriza de Thaumaturgo (Brasil) hay mejores condiciones de vida, luz, agua potable, desagüe, Internet?

La diferencia es que allá el municipio administra la salud, la educación, el transporte, la agricultura. El Gobierno le transfiere los fondos necesarios y luego los fiscaliza. Con esto, los alcaldes ya no necesitan ir hasta la capital para pedir recursos.

— ¿Será aplicable en el Perú con tantas gestiones municipales ineficientes?

Hoy con tantos sistemas que se deben manejar, como el SIAF y el Seace, cualquiera no debería poder postular como alcalde.

— Y si ustedes pudieran ser parte de Brasil...

Estamos orgullosos de ser peruanos.

— ¿Pese al olvido?

Nosotros seguiremos izando la bandera todos los domingos y, así no nos consideren, seguiremos cantando el himno cada vez más fuerte.

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