“Es difícil que Kenji pueda [tomar las riendas del fujimorismo]. Tendría que llegar en alianza”, afirma Dargent. (Foto: Archivo El Comercio)
“Es difícil que Kenji pueda [tomar las riendas del fujimorismo]. Tendría que llegar en alianza”, afirma Dargent. (Foto: Archivo El Comercio)
Rocío La Rosa Vásquez

El politólogo de la PUCP Eduardo Dargent considera que “es muy difícil” que pueda tener posibilidades de ganar una elección presidencial a futuro, pues está muy debilitada.

— ¿Esta prisión preventiva puede ser el inicio del fin o el fin mismo de la carrera política de Keiko Fujimori?
Estamos viendo a una Keiko muy debilitada. No me atrevería a decir ‘el fin’ porque puede que continúe, pero esa Keiko de cuarenta y tantos por ciento ya no es el caso. Creo que Keiko puede ver su futuro en el presente de Alan García, que haga lo que haga hay una percepción de que es corrupto y no te la puedes quitar de encima.

— ¿Tiene aún posibilidades de ganar una elección presidencial, pensando en el 2021?
La veo con una carga negativa muy alta. Es muy difícil.

— ¿Sus opciones serían mayores para el Senado, si prospera la bicameralidad, o nuevamente para congresista?
Eso ya queda en la especulación, pero siendo una persona que estuvo dos veces cerca de ganar la presidencia ya todo es cuesta abajo. El mayor problema del país no es solo el derrumbe del fujimorismo, sino el altísimo rechazo de toda opción política.

— ¿Cómo explica que una persona que tuvo tanto poder político hoy esté tras las rejas?
Primero, es responsabilidad del propio fujimorismo, por su estrategia de confrontación, de usar el poder para limitar las posibilidades de un juzgamiento, la forma como persiguieron a sus rivales, la idea de un [presidente] Vizcarra que tenía que estar domadito. Construyeron un estado de opinión pública en el cual ellos fueron vistos como corruptos y abusivos.

— ¿Ve alguna figura que pueda asumir ahora el timón del partido?
Se sobredimensionó la idea de que era un partido político por el resultado en la última elección. Cae la cabeza, no llegas a tener una organización firme y es muy difícil que uno de esos personajes que aceptaron ser segundones de un partido familiar se convierta en la cabeza del mismo. Es más factible buscar otro Fujimori.

— ¿Esta caída de Keiko le sirve a su hermano Kenji para tomar las riendas del fujimorismo?
Es difícil porque tendría que enfrentarse a sectores duros que lo han acuchillado públicamente, y tendría que llegar en alianza con estos sectores que están midiendo hacia dónde se van.

— ¿Sin Keiko, qué opciones tienen los congresistas de Fuerza Popular hasta el 2021?
Está en juego lo que va a pasar con esa bancada, porque es difícil que te vayas a algún lado. Algunos han estado muy identificados con Keiko y tienen que quedarse donde están. Los de regiones no tienen un vínculo fuerte ni con el fujimorismo ni con el liderazgo. Lo más interesante está en estos sectores, ver si pueden llevar el partido hacia algo que les sirva, o irse si sigue estando en manos de los sectores más duros.

— ¿Qué motivación les queda a estos para no abandonar el barco?
En este momento estar juntos, poder negociar cosas con el Ejecutivo, poder tener algo en la ley de presupuesto. De pronto sienten que irse así no más es demasiado arriesgado. Tendría que haber algún lugar que los acoja.